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Cronología de una pesadilla

El mediapunta andaluz pasó tres veces por el quirófano, dos en Sevilla y la última, el 30 de agosto de este año, en Oporto

Lasso, rodeado de compañeros, tras sufrir la lesión hace dos años. LALIGA

«Por el dolor que tiene, nos tememos lo peor». Minutos después de que Lasso fuera sustituido en el Tenerife-Alcorcón, su entrenador, Baraja, expresó su preocupación sin imaginar que dos años más tarde acabaría recibiendo la noticia de su retirada.

El 14 de diciembre de 2019 comenzó un calvario del que Borja Lasso trató de huir pasando tres veces por el quirófano. La primera de todas, el 17 de diciembre de 2019, fecha en la que fue operado de su fractura de peroné por el doctor Daniel Cansino en la Clínica Sagrado Corazón de Sevilla. «La intervención ha consistido en reducir la fractura y dejar fijos los fragmentos de hueso rotos y separados», explicó el especialista tras corregir los efectos de un «traumatismo de alta energía».

La crisis sanitaria del coronavirus estaba cerca de provocar el estado de alarma y, entre otras cosas, paralizar las competiciones, situación que podía permitir a Lasso contar con más tiempo para volver a jugar en la temporada 2019/2020. Pero su recuperación no evolucionó como estaba previsto y Baraja redujo las expectativas el 5 de junio aclarando que iba a ser «complicado» que empezara a entrenar a pleno rendimiento. Al menos, ese mes sí retornó a la Isla para ser tratado por el equipo médico del club, avance que no fue suficiente para que jugara.

La meta quedó situada en el arranque de la campaña siguiente, iniciada en el banquillo por Fran Fernández, con una plantilla diseñada por Juan Carlos Cordero, quien compartió su deseo de que Borja se convirtiera en «un último gran refuerzo». Tampoco pudo ser. Terminó la corta etapa de Fran sin que Lasso estuviera disponible. El 23 de octubre, en la presentación de Ramis como nuevo técnico, el director deportivo contó que el sevillano no terminaba de recuperarse. «Todas las partes implicadas están poniendo mucho interés, pero se está alargando mucho», admitió.

Al fin, el club aportó novedades el 18 de diciembre mediante un parte firmado por su médico jefe, Dámaso Moreno. Borja había vuelto a entrar en el quirófano. «El paciente superó el postoperatorio tras ser intervenido nuevamente por la fractura en el tobillo izquierdo tipo C, con afectación de la sindesmosis, y realizándole una intervención inicial de urgencia en diciembre del 2019, mediante placa peronea, reducción abierta, osteosíntesis y dispositivo de reparación suprasindesmal. Hasta este momento, Lasso presentaba secuelas, con dificultad para la flexión dorsal del pie y deformidad en garra del primer dedo del pie izquierdo», publicó.

El cambio de año llegó con aires de esperanza para Lasso, cuyo contrato fue renovado por un año más, hasta junio de 2022. El final de la pesadilla parecía cercano cuando el Tenerife colgó en su web, el 24 de marzo de 2021, la noticia de que la «magia» había vuelto a El Mundialito. Borja ya era uno más en los entrenamientos. «Está muy bien, con unas ganas increíbles», apuntó Ramis, quien no descartó darle minutos antes del cierre del ejercicio 20/21. «Si él quiere, me gustaría; psicológicamente le puede hacer bien».

Ese retorno a la competición no se produjo. Y lo peor fue que Lasso tampoco comenzó la pretemporada de 2021 con sus compañeros. «Es un golpe inesperado. No está bien. Nos ha pedido tiempo y le están evaluando nuevos médicos en la Península», aclaró desesperado Juan Carlos Cordero.

Las dudas condujeron otra vez a Lasso a una sala de operaciones, esta vez en Oporto. Fue el prestigioso doctor Niek van Dijk, el 30 de agosto, el encargado de realizarle una cirugía artroscópica exploradora y terapéutica, en la que se le retiró tejido fibroso. El último intento dio paso a la retirada.

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