eldia.es

eldia.es

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Música
Pablo Sáinz-Villegas Guitarrista

«Una simple nota en una guitarra es poesía y, si eso se siente, es mágico»

El guitarrista Pablo Sáinz-Villegas interpreta este viernes en el Auditorio de Santa Cruz de Tenerife el 'Concierto de Aranjuez'

Pablo Sáinz-Villegas El Día

El guitarrista riojano Pablo Sáinz-Villegas estará este viernes día 6, a las 19:30 horas, en el Auditorio. Se presenta como solista ante el público de la Orquesta Sinfónica para interpretar el sensacional ‘Concierto de Aranjuez’, compuesto por Joaquín Rodrigo durante la Guerra Civil. «Tengo la fortuna de sentir que tengo una conversación íntima con él cada vez que lo toco», celebra sobre una de las piezas más versionadas de la historia.

El de este viernes será su primer concierto con la Orquesta Sinfónica de Tenerife.

Creo que oficialmente sí. Hace muchísimos años hicimos La vida breve, de Manuel de Falla. Pero fue hace por lo menos hace unos 12 o 15 años. Se podría decir que este es mi debut con la Orquesta Sinfónica de Tenerife, sí.

¿Y qué referencias tiene de nuestra orquesta?

Es una de las mejores de España. Su historia y su prestigio está en la conciencia colectiva de todos los músicos y los amantes de la música de este país. La recuerdo al crecer, cuando tenía 15 o 20 años, cuando estaba de director artístico el maestro Víctor Pablo Pérez. Ya era una de las orquestas de mayor renombre. También creo que el hecho de que esté en ese magnífico Auditorio diseñado por Calatrava hace que la experiencia trascienda más allá de la propia música. Creo mucho en la experiencia artística completa, que es lo que pasa antes, durante y después del concierto. La música se expande y existe en un espacio y tener un lugar sin igual donde crear de esa experiencia lo mejora todo.

¿El papel de la guitarra en el mundo sinfónico ha evolucionado, ha crecido?

Ese es uno de mis propósitos desde que soy profesional, incluso desde cuando era estudiante. Tengo esa idea de devolver a la guitarra ese protagonismo a nivel sinfónico, incluso a nivel instrumental en el mundo clásico. Es un instrumento que es patrimonio inmaterial de nuestra historia, de nuestro país y que merece ese reconocimiento, ese apoyo y ese cuidado. También lo merece de las instituciones musicales de este país.Los maestros Andrés Segovia o Narciso Yepes mantuvieron viva esa llama de este instrumento y su historia, que está vinculada a nuestra cultura, pero se ha disipado un poco. La guitarra es un instrumento que tiene un valor unificador del mundo, ya que es enormemente popular por su versatilidad. Es uno de los instrumentos más cercanos al corazón de las personas y que mejor se expresan en diferentes estilos. Es tan global como local. Si piensas en la guitarra, piensas en España. Al mismo tiempo, la guitarra se expresa en muchas y diferentes culturas, géneros y estilos musicales. Es patrimonio de España y de nuestra cultura.

Es una obra universal porque trata emociones universales como el dolor o la redención»

decoration

Y viene a deleitarnos con el Concierto de Aranjuez, una auténtica joya muy complicada de ejecutar.

Forma parte de mi esencia como músico. Lo he tocado muchas veces alrededor del mundo. Pese a que no tuve la dicha de conocer personalmente al maestro Joaquín Rodrigo, sí que tengo la fortuna de sentir que tengo una conversación íntima con él cada vez que lo toco. Es una obra universal porque trata emociones universales como el dolor, la redención y la esperanza. El maestro Joaquín Rodrigo supo como nadie volcar todas estas emociones y vivencias personales que él tuvo para utilizar la música como un medio de redención. Lo consiguió de una forma tan vulnerable que cualquier ser humano que lo escuche esas melodías tan honestas –allá donde esté en el mundo– se conmueve. 

Es una pieza que le ha llevado a viajar por medio mundo. Recientemente, de hecho, la interpretó en Berlín.

Sí, es la obra que más interpreto en mi vida profesional. La pasada Nochevieja, en el concierto de Año Nuevo, la toqué con la Orquesta Filarmónica de Berlín y el maestro Petrenko. Hacía 40 años que no había un guitarrista tocando con esa orquesta. Eso implica poner en valor de nuevo ese instrumento que en muchas ocasiones se aprecia más en el extranjero que en España. Es una dicha también cada vez que lo toco en España porque implica reivindicar lo nuestro, es algo auténtico vinculado con nuestra cultura. Debemos ponerle ese valor.

¿Cómo es trabajar con el maestro John Williams o tocar frente a personalidades como el Dalai Lama?

Sí, la música me ha llevado a conocer a gente fascinante y de una inspiración tal que me lleva a dar lo mejor de mí cada vez que toco la guitarra. Eso ha sido un fiel reflejo del valor que para ellos tiene la guitarra. Por ejemplo John Williams, que tiene cuatro Óscar y ha compuesto todas las bandas sonoras que tenemos en la memoria colectiva. Recientemente, además, me compuso otra obra que he grabado para Sony y que ha salido hace apenas unos días. Está interpretada con Yo-Yo Ma y se llama A Prayer for Peace. Se compuso expresamente para nosotros. Lo grabamos en septiembre pasado cuando todavía no teníamos este conflicto que está creando tanto dolor, desesperación e incertidumbre. Esa pieza la necesitamos ahora más que nunca. La música une, es el lenguaje de las emociones, habla de la experiencias que no tocamos ni vemos pero que sí sentimos. Es una experiencia que unifica a la condición humana y es ahí donde debemos reconocernos, sentir y ver que lo que nos une es mucho más que lo que nos diferencia y nos define como seres humanos. La música es una expresión que nos recuerda que todos tenemos ese lenguaje universal que es el del dolor y el placer y de todo lo que hay entre medio.

La música me ha llevado a conocer a gente fascinante que me lleva a dar lo mejor de mí»

decoration

Si hay un instrumento accesible es el de la guitarra, ¿es quizás el más democrático de todos?

Sí. La guitarra además es reconocible por todos. Se la muestras a un niño y en seguida todos saben lo que es. Tiene algo muy intrínseco al corazón de las personas, muy cercano. Es un instrumento tremendamente difícil en lo técnico en lo que se refiere a la guitarra clásica española y al mismo tiempo se expresa en tantos estilos que la hace versátil. Tocar tres acordes y tocar una canción es relativamente sencillo. Eso es lo que lo hace tan poderoso: poseer desde esa sencillez hasta esa complejidad técnica.Por eso es tan cercano, porque además es transportable. Una simple nota en una guitarra es poesía y si el que la toca siente esa poesía dentro de él y tiene algo de mágico, íntimo y de contar una historia.

Compartir el artículo

stats