Tenerife Espacio de las Artes (TEA) continúa trabajando para mantenerse como referente de la cultura y la reflexión, aún en tiempos de coronavirus. Sin salir de cine TEA es una más de las iniciativas que ha lanzado esta institución que se apoya en las redes sociales para continuar dando a conocer los más variados productos culturales, sobre todo aquellos realizados en las Islas. Sin embargo, las diferentes publicaciones que se vienen sucediendo, y que continuarán hasta el final del confinamiento, buscan mucho más que entretener a los canarios, puesto que el equipo de TEA defiende la reflexión compartida entre los usuarios de estas herramientas en la red.

Más allá del trabajo a través de internet y las redes sociales, el director artístico de TEA, Gilberto González, explica que en el caso de las actividades relacionadas con el cine, "nuestro trabajo cambia" porque muchas películas no se pueden mostrar debido a las licencias y solo se pueden proyectar en el cine o pagando por ello. No obstante, hay otras muchas que son de licencia libre porque sus autores así lo han decidido o porque se encuentran alojadas en espacios públicos internacionales como es el caso de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos. Y en ese sentido, TEA ya había iniciado el trabajo desde el pasado año con la creación del Videoclub. Esta función continúa su andadura estos días.

Pero Gilberto González es claro: "Lo que ofrecemos no es cine por cine, sino que nuestra propuesta siempre viene acompañada de una reflexión". En este sentido, el director artístico afirma que "una de las funciones de nuestro centro es ayudar a la sociedad a entender la imagen y por eso no fomentamos el consumo de la imagen sin motivo, sino que defendemos la comprensión de la imagen y, en ese sentido, las redes nos permiten trabajar en esta línea".

Con esta acción, explica el conservador de Cine y Vídeo de TEA, Emilio Ramal, el centro de arte pretende hacer llegar el trabajo y las acciones que se vienen realizando en el departamento en los últimos tiempos. "Afortunadamente tenemos las redes sociales y vamos a tratar de estar más cerca de los usuarios", explica el encargado, quien recuerda que el departamento de Audiovisuales de TEA se centra en la exhibición de programación, con especial incidencia en el cine de autor, de vanguardia, y muy radical con propuestas que no suelen tener cabida en las salas comerciales. A este espacio se suma, además, el mencionado Videoclub, "un lugar para la reflexión y el pensamiento crítico sobre el uso de la imagen y el lenguaje cinematográfico", afirma Emilio Ramal.

Desde que comenzó esta iniciativa en las redes sociales, han presentado sus obras el cineasta tinerfeño Roberto Chinet, quien invitó a los canarios a ver el cuentometraje El guisante y la sirena dentro de Sin salir de cine TEA; así como Pablo Fajardo, quien presentó su largometraje El huido. Además, y aprovechando esas creaciones de licencia libre, TEA invitó a los canarios a ver Asalto y robo de un tren, una cinta de 1903 que ya se pudo ver dentro del Videoclub y que forma parte de la selecta lista de películas preservadas por la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos.