La arqueología canaria, en concreto el origen de sus habitantes primigenios, copará hoy el programa de actividades del Museo Arqueológico Nacional (MAN) de Madrid, donde el profesor de la Universidad de La Laguna José Farrujia de la Rosa, y el presidente de la Fundación Canaria Tamaimos, José Miguel Martín, participarán en el acto titulado Identidad canaria. El poblamiento amazigh de un archipiélago Atlántico, con motivo del Día de Canarias.

El evento, que será presentado por la arqueóloga del MNA Ruth Maicas Ramos, comenzará a las 18:30 horas, con la conferencia que impartirá el arqueólogo Farrujia sobre su último libro, Identidad canaria, en el que abordará distintos aspectos relacionados con el poblamiento humano de Canarias por los pueblos imazighen.

Acto seguido se proyectará el documental Canarias Amazigh. Tras las huellas de los antiguos canarios (2017), trabajo dirigido por Antonio Bonny y Pablo Rodríguez, en el que se abordan distintas teorías sobre los primeros 'residentes' que llegaron a partir de un recorrido por diversos yacimientos arqueológicos en Canarias y zonas del África Occidental.

Farrujia facilitará a los presentes en la conferencia las claves que permiten clarificar cuáles son las teorías y planteamientos que giran en torno a este tema desde tres frentes: la epigrafía, la genética y la arqueología en su sentido más amplio.

"Lo más importante es que hay una serie de datos que han aportado los estudios recientes de la genetista Rosa Fregel que vienen a complementar algo que ya planteamos hace algunos años. Por un lado, que las islas Canarias están habitadas desde antes de la romanización del norte de África; por otro, la idea que sostiene que el poblamiento de Canarias, casi con toda seguridad, se pueda explicar a partir de dos grandes oleadas".

La primera colonización del archipiélago se establece en torno al primer milenio antes de Cristo, "que se puede relacionar con una cultural amazigh arcaica". La segunda coincide con la presencia romana en el norte de África, entre los siglos I a.C y I d.C, "que se puede definir como una cultura amazigh romanizada", afirmaciones que se pueden argumentar desde el punto de vista epigráfico, arqueológico y con el respaldo de la genética".

Al parecer, Fregel, también ha defendido la existencia, a partir de sus estudios, de un sustrato pancanario que se presenta en todo el archipiélago y luego las evoluciones registradas en todas las Islas.

Los restos arqueológicos refutan estas teorías sobre la primera oleada del moradores de Canarias. "La cronología más antigua es el siglo IX a. C y procede de Lanzarote, en concreto del yacimiento de Buenavista, fechado por Carbono 14. No es casual que Lanzarote, la isla más cercana al continente africano, sea la que a día de hoy tenga la cronología más antigua de toda Canarias. La genética también indica que las islas se fueron poblando por etapas de este a oeste, que encaja con la cronología más antigua en esta isla", matizó

Tenerife también tiene cronologías anteriores a la era, en concreto tres yacimientos (Barranco Hondo, Icod de los Vinos y Buenavista del Norte), donde se han datado restos del siglo V a.C. Y en La Palma en el siglo III. a.C.

"Se van poblando con el paso del tiempo. Las cronologías han sido puestas en tela de juicio porque vivimos en unas islas en las que la actividad volcánica puede repercutir sobre las dataciones de C14 y variarlas. Lo cierto es que en el caso de Tenerife son tres yacimientos ubicados en zonas distintas de la isla. Esto quiere decir que en torno al siglo V a.C. ya había poblamiento estable en Tenerife porque hablamos de tres espacios dispares ocupados en la misma fecha".

Los estudios de Fregel también han contribuido a contradecir algunas especulaciones que defendían la idea de que al archipiélago llegó la especie humana a partir de la presencia romana en el norte de África.

"Las investigaciones de Fregel señalan que la cantidad de mutaciones genéticas que se reflejan en los huesos analizados son tantas que es imposible que el poblamiento se produjese en un plazo temporal tan corto como desde la presencia de Roma en el norte de África".

Otra aspecto demostrado a través de la genética es que existe un mismo sustrato poblacional para todo el archipiélago. "Llegó una primera oleada a todas las islas y es curioso ver como la genética señala como Lanzarote y Fuerteventura recibieron componentes poblacionales que no están presentes en el resto de las islas. Hace años aparecieron las inscripciones denominadas latino canarias que no existen en el resto del archipiélago. Esto viene a corroborar que las islas más próximas al continente africano son, a priori, las más romanizadas".