El vicepresidente del Gobierno de Canarias y consejero de Hacienda, Román Rodríguez, pidió ayer en Bruselas que, al aplicar el impuesto mínimo global del 15% a las multinacionales acordado en el marco de la Organización para el Comercio y Desarrollo Económico (OCDE), se mantenga el régimen diferenciado de Canarias. «Creemos que es bueno que las grandes transnacionales paguen como mínimo ese 15%, pero nosotros tenemos un modelo fiscal exceptuado, aprobado por la Comisión Europea, y creemos que toca mantener esa excepción también en las Islas. No será fácil, pero lo vamos a pelear», declaró Rodríguez tras reunirse en Bruselas con el embajador español ante la Unión Europea, Marcos Alonso, y con el director general de Política Regional y Urbana de la Comisión Europea (CE), Marc Lemaitre.

El vicepresidente canario recordó que las Islas ya consiguieron en su días quedar exceptuadas del IVA, que se aplica en toda la Unión. «Nosotros no lo tenemos, tenemos una imposición indirecta distinta y más reducida –el IGIC–. También tenemos impuestos especiales distintos al espacio fiscal europeo y, por lo tanto, reclamamos este respeto al hecho diferencial en esta materia», subrayó.

Rodríguez pidió también una excepcionalidad de trato para Canarias respecto a la consecución del objetivo de descarbonización marcado en el paquete Objetivo 55, considerando que el territorio importa todas las mercancías por mar y por aire. «Esto tiene un coste evidente en CO2 que no pueden asumir en solitario las sociedades locales, por ahora estamos exceptuados del coste de CO2 en tráfico aéreo y pretendemos dar continuidad a esta solución y buscar una solución para el tráfico marítimo», explicó Rodríguez.

Estrategia RUP

El también consejero de Hacienda se refirió a la revisión de la estrategia comunitaria para las regiones ultraperiféricas, que la Comisión Europea publicó ayer y que no se actualizaba desde 2017, un periodo en el que según el vicepresidente «transcurrieron demasiadas cosas», como la pandemia y la guerra en Ucrania. Rodríguez afirmó que es una estrategia que «redobla el compromiso de las instituciones europeas con estos territorios» y se mostró convencido de que habrá «una apuesta por la transición energética, por la digitalización, por la diversificación de la economía, y por la mejora del empleo en todos los ámbitos, especialmente, los juveniles».

El vicepresidente aprovechó la visita a Bruselas para invitar al embajador español y al director general de Política Regional de la CE a presentar la nueva estrategia en las Islas e insistió en la importancia de que se hagan políticas compensatorias para las regiones ultraperiféricas.

En los encuentros celebrados ayer también hubo un espacio para tratar la erupción del volcán de La Palma. El político canario pidió, tanto al Lemaitre como a Alonso, que se efectúe un acompañamiento de los ciudadanos palmeros en la reconstrucción del territorio. «Ahí reclamamos participación española, participación europea y nosotros también estamos comprometidos con que la reconstrucción sea sostenible e inteligente. Que aprovechemos la reconstrucción no solo para recuperar lo perdido sino para mejorar el futuro», expuso el vicepresidente del Gobierno canario.