La realidad de la ruta hacia Canarias contradice al ministro Albares

El senador autonómico y líder de CC, Fernando Clavijo, tachó de "desafortunado" que el Gobierno "alardee" de un descenso en la llegada de migrantes coincidiendo con el naufragio de una neumática y apuntó que no se puede "vender como un éxito la bajada en la llegada de pateras a las islas ligado al acuerdo con Marruecos cuando la ruta canaria sigue cobrándose vidas". Clavijo censuró en un comunicado que tanto el Estado como la Unión Europea "se empeñan en convertir a las Islas en la fosa común del sur de Europa y en seguir actuando como si no ocurriera nada. Nos sentimos abandonados por el Estado". Por su parte, el senador del PP por Gran Canaria, Sergio Ramos, exigió Gobierno de España la instalación urgente del Sistema de Vigilancia Exterior (SIVE) en la zona norte de Lanzarote, ante el aumento de migrantes fallecidos cerca de las costas isleñas.

Los flujos migratorios están supeditados a muchos condicionantes que van más allá de las relaciones bilaterales entre países vecinos. Las condiciones meteorológicas y el estado del mar, en muchas ocasiones, determinan el momento en el que las pateras se echan al océano. El incremento de la seguridad en la costa marroquí solo hace que las mafias opten por desplazar sus puertos de salida más hacia el sur, añadiendo peligrosidad a la travesía por una de las rutas migratorias más peligrosas. Dos de las embarcaciones que llegaron a Canarias esta semana zarparon desde la costa del Sáhara Occidental, una desde L'Blaya, el puerto de El Aaiún, y la otra desde Cabo Bojador, ubicado 150 kilómetros más al sur. Si durante los meses más duros de la crisis migratoria de 2020, en el último trimestre del año, el perfil de los migrantes que arribaron a las Islas fue principalmente de origen magrebí, a lo largo de 2021 la mayoría de las personas que llegaron de manera irregular al Archipiélago procedían de países subsaharianos, un perfil que se mantiene en este año.

La policía investiga lo ocurrido en el vuelco de la patera desde la que cayeron al mar 25 migrantes

Un aviso de la ONG Caminando Fronteras alertó ayer sobre la presencia de una neumática al sureste de Fuerteventura, con 56 migrantes a bordo. El avión Sasemar 103 localizó la lancha a 107 kilómetros de la costa majorera y Salvamento Marítimo activó a la salvamar Mízar, que zarpó desde el puerto de Gran Tarajal. Además, dio aviso a un mercante hongkonés que se encontraba en la zona para que permaneciera junto a la barquilla hasta que llegaran los equipos de rescate, porque existía riesgo de que volcara en alta mar. Antes de que llegara la salvamar, la tripulación del mercante ya había puesto a salvo a 43 de los 56 ocupantes de la zódiac, a pesar de que era una maniobra peligrosa pues el buque es de gran envergadura, con casi 200 metros de eslora y 32 de manga, y débil lancha corría el riesgo de chocar contra el casco por el movimiento de las olas. Según explican fuentes de Salvamento Marítimo, el Fortune Bell desplegó una escala para que los migrantes pudieran subir hasta la cubierta, pero se desconoce los motivos que llevaron a la tripulación a embarcar a los migrantes.

El gran calado del mercante –que venía desde Egipto, pasando por Argelia y Gibraltar, y se dirige a Costa de Marfil– obligó a que su atraco se realizara en el Puerto de La Luz. Al desembarcar, los migrantes mostraron señales de agradecimiento a la tripulación del buque. Los otros 13 miembros de la expedición subieron a la salvamar y fueron trasladados a Puerto del Rosario.

Un avión marroquí busca una neumática con 59 personas cerca de su costa

Los supervivientes del naufragio que se produjo en la madrugada del martes han sido trasladados al Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) de Barranco Seco donde, según Delegación del Gobierno, están descansando y recuperando fuerzas, para terminar los trámites policiales y los interrogatorios y tratar de esclarecer cómo se produjo el vuelco de la neumática y determinar cuántas personas permanecen desaparecidas. Cuando concluyan esta labores serán derivados a Cruz Roja, para que los acoja en un recurso de acogida humanitaria.

Salvamento Marítimo tiene conocimiento de que una zódiac con 59 personas a bordo está desorientada y ha pedido auxilio, según les detalló la ONG Caminando Fronteras, que ha facilitado datos sobre su localización. No obstante, al estar en aguas muy próximas a la costa marroquí, la responsabilidad del rescate corresponde al país vecino, que ha enviado un avión para rastrear la zona pero, hasta el momento, no ha tenido éxito. Helena Maleno, portavoz de la ONG, comunicó en sus redes sociales que durante la madrugada del miércoles fallecieron seis ocupantes de esta barquilla.