Casimiro Curbelo es un político de visión periférica que nunca ha perdido de vista los pequeños detalles; elementos que crecen en su entorno más próximo y que lo han convertido en uno de los dirigentes más longevos del Archipiélago. "No solo voy a pedir que se prorroguen los erte en hostelería, sino es que no nos sirve otra opción... Debemos que ser sensatos porque estoy seguro de que a partir de esta semana el Gobierno marcará unas medidas y protocolos para ir saliendo del confinamiento de una manera escalonada. Pero si no hay turismo, que no lo habrá, no podemos arruinar al pequeño empresario teniendo que afrontar el pago de las nóminas de unos trabajadores que no son necesarios porque no existe una oferta que mantenga un equilibrio entre ganancias y pérdidas. Yo no tengo ni una sola duda de que Madrid no pondrá pegas para ampliar esos ertes, entre otras cosas, porque esta comunidad es la que peor futuro económico tiene para superar esta crisis", avanza un dirigente que observa un porvenir oscuro: "El consejero de Hacienda ya ha ofrecido algunos avances respecto a las pérdidas que va a sufrir el sector turístico canario, pero debo confesar que mis sensaciones son algo peores. Yo creo que al final de esta crisis estaremos hablando de más de 10.000 millones de euros que vamos a dejar de ingresar", vaticina el político gomero.