El Gobierno de Canarias adoptó en el año 2010 el "Acuerdo relativo a las medidas extraordinarias para la reducción del gasto en la actividad administrativa y la gestión de los recursos humanos en la Administración Pública de la Comunidad Autónoma de Canarias, los organismos autónomos, entidades de derecho público, sociedades mercantiles públicas dependientes, entidades públicas empresariales y fundaciones públicas". Un acuerdo que el Ejecutivo canario modificó en el año 2016 pero que continuó manteniendo criterios de austeridad ante la celebración de cualquier clase de acto institucional o evento. El texto de esa norma indica que "con carácter general, en la organización de todo tipo de eventos oficiales, no se programarán cócteles, brindis o copas de honor con cargo a los presupuestos de la Administración Pública, quedando restringidos a los que excepcionalmente se justifiquen por el centro directivo competente". Sobre la localización de este tipo de eventos el texto además apunta que, "cuando la organización de los actos corresponda a la Administración Pública de la Comunidad Autónoma de Canarias, los organismos autónomos, entidades de derecho público, sociedades mercantiles públicas dependientes, entidades públicas empresariales y fundaciones públicas se procurará que se desarrollen en las propias dependencias".