Los socialistas de Tenerife y Canarias acudieron ayer, con porcentajes de participación muy divergentes según los municipios, como el 30% de Santa Cruz de Tenerife o el 76% de Los Realejos, a otra cita interna con las urnas, en esta ocasión para refrendar o no el pacto para cogobernar España junto a Podemos. Aunque la sede nacional de Ferraz había ordenado no filtrar datos para que no se hicieran lecturas territoriales, los resultados fueron goteando durante la jornada de una agrupación local a otra y en casi todas el apoyo a la decisión previa de la Ejecutiva Federal de desbloquear el país con este acuerdo fue mayoritario, en torno o superior al 90%. Un porcentaje que se repitió en las Islas.

EL DÍA hizo un recorrido por algunas de las agrupaciones tinerfeñas desde primera hora y, en una de las de mayor solera, la del Puerto de la Cruz, la militante Dácil Torres resumió el débil o casi inexistente temor, con algunas excepciones, que sienten los afiliados a cogobernar con los de Pablo Iglesias. "Yo no tengo miedo porque son de nuestra familia, están en nuestras familias: son hijos, hermanos, primos, amigos...". Su marido, Eloy Núñez, que también fue de los primeros en acudir a la sede portuense y que, como ella, ronda los 60 años, subraya que "no hay muchas diferencias pues gobernamos con ellos también en esta ciudad y en otros muchos sitios. Lo que hay que hacer es desbloquear esto de una vez", remarca.

De la misma opinión es Pedro Montelongo, afiliado de mediana edad y de la célebre calle Mequinez (La Ranilla), que, lejos de mostrar miedo a los de Iglesias, dice contundente que "para algo somos de izquierdas. Este es el único pacto que puede sacarnos del bloqueo", recalca tras ser el primero en votar.

En el PSOE portuense estaban llamados a la única urna 215 afiliados (llegó a contar con unos 600 en sus años de más arraigo, a finales de los 80 y antes de la regularización bancaria). Se trata de la cuarta agrupación con mayor número, tras La Laguna, Santa Cruz y Adeje, y ayer acudió solo un 45%, con 92 votos a favor del pacto, uno en contra y uno en blanco. Según Domingo Perera, uno de los militantes más antiguos y activos, la repetición electoral y la situación de bloqueo ha cansado a los afiliados y de ahí la baja participación frente a la que tuvieron en 2016 con el pacto con Cs, si bien a escala estatal la media fue solo del 51% en esa ocasión. Perera no disimula algunas dudas sobre Iglesias, pero es consciente de que no tienen más opción en este tablero actual.

La lectura en la capital tinerfeña fue otra. Según las fuentes consultadas, y aunque se trata de una agrupación "muy especial", el escaso 30% de participación tiene más que ver con el hecho de que, aunque fuese vinculante, la votación de ayer versaba sobre una decisión tomada de antemano por la Federal y que trata de desbloquear la situación tras unas nuevas elecciones que casi nadie quería en el partido. En este caso, se contaron 90 sufragios a favor del cogobierno y 9 en contra, con 25 militantes que usaron internet para ejercer su derecho al voto, opción a la que se podía recurrir desde este viernes.

La interpretación en Santa cruz era muy similar a la que hacían diversos afiliados con los que habló EL DÍA en la sede de La Orotava. También en este caso, dirigentes relevantes como María José Alonso o Samuel Mesa, secretaria general y responsable de Organización, lamentan el cansancio existente, creen que se debió evitar el 10N y no temen "un gobierno progresista de coalición" de Podemos, que es como rezaba la papeleta de ayer.

Juan Porfirio Hernández, histórico y fiel militante desde los años 70, sí muestra más reparos respecto a la abstención de ERC y preferiría que la investidura saliera porque Cs decide al final abstenerse. Este afiliado en uno de los municipios en los que el PSOE ha ido subiendo su representación local hasta recuperar los 5 ediles de 1983, teme también que, de ser presidente Sánchez ahora, el bloqueo persista luego con el presupuesto para 2020. No obstante, reconoce que el pacto con Podemos es la mejor opción y, por eso y como los otros consultados, votó a favor. Eso sí, deja en manos de Miquel Iceta, líder del PSOE catalán, y de Sánchez la posibilidad de que, de haber elecciones en Cataluña, haya un tripartito con En Comú Podem y ERC para tratar de implicar a los republicanos en la gobernabilidad estatal.

En la Villa orotavense, votó un 60%, con un 15% mediante internet y solo una papeleta contraria. En este caso, se permitió votar de 10 a 14:00 horas, el mismo horario que en Santa Cruz, mientras que en el Puerto se dejó hasta las 16:00 y, en La Laguna, hasta las 18:00, con una participación del 40% sobre las 15:20 y un 10% de voto telemático.

En municipios como Icod, donde participó el 72% de los llamados a votar en urna, hubo solo 2 votos negativos, mientras que, en Los Realejos, acudió el 76% de los 80 inscritos, con únicamente un sufragio en contra y dos en blanco, lo que representa un respaldo superior al 93%.

Según diversas fuentes, el respaldo en el resto de la Isla rondaba el 90%, con algunos municipios casi en el 100% y otros no menores al 85. En casi todas las sedes, además, la mayoría de afiliados, que siempre han estado más a la izquierda que el deambular del partido o los gobiernos del PSOE, coincidían con Dácil Torres: Podemos no les da miedo y los sienten casi de la familia.