Cáritas ha pedido al nuevo Gobierno de Canarias, que se ha marcado como prioridad luchar contra la pobreza y la exclusión social en las islas, que establezca una renta mínima, invierta en vivienda pública, regule el alquiler vacacional para que no perjudique a los asalariados y apueste por la formación de los trabajadores para mejorar sus oportunidades.

El director de Cáritas en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Juan Rognoni, reclama al Ejecutivo regional una mayor concreción sobre las medidas que pondrá en marcha para luchar contra la pobreza en Canarias, donde el 29 % de la población se encuentra en exclusión social, recuerda.

Rognoni demanda al presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres (PSOE); y la consejera de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud, Noemí Santana (Podemos), con quien todavía no se ha reunido, que se sienten a dialogar con los agentes sociales para diseñar de forma conjunta una estrategia para combatir la pobreza.

Asimismo, el director de Cáritas solicita al Ejecutivo regional que apoye a las empresas para que contraten a personas que tienen dificultad para acceder al mercado de trabajo, que, a su juicio, es necesario que se dignifique.

Sobre la renta mínima a la que podrían acceder las personas que se encuentren en situación de exclusión social, tal y como establece el Estatuto de Autonomía, Rognoni dice que se trata de una buena medida que Cáritas ha demandado a todos los partidos políticos.

En su opinión, la renta mínima "no es la solución" a la pobreza, aunque es una ayuda importante para el 40 % de los desempleados de Canarias que no tienen derecho a ningún tipo de prestación.