Tenerife se quedó el pasado sábado sin representante en la Superliga Masculina. Casi una década después de su llegada a la élite, el Tenerife Sur Arona certificó con su derrota en Caravaca el descenso en una temporada para olvidar. Marcado inevitablemente por la crisis económica, el proyecto del club sureño ha naufragado este curso y deja la máxima categoría con un palmarés al alcance de pocos: una Copa del Rey y una Supercopa. El alma máter del Arona, junto al presidente Eulogio Hernández, es Jaime Fernández Barros. ¿Qué ha pasado para que el Tenerife Sur haya descendido? Formamos la plantilla en torno a cuatro pilares: Todorov, Gaona, Ruiz y Sugrañes. El primero vino fuera de forma, el segundo tuvo problemas personales y el tercero no estuvo al mismo nivel. Quisimos reforzarnos en enero con Vega y Liovi, que se nos lesionaron. Eso es lo que ha pasado. Los ingleses han cumplido, pero no eran ellos los que debían llevar el peso. Extraña acostumbrados a ver al equipo en los puestos altos Después de nueve años clasificándonos para Europa, este año han pintado bastos. Hemos hecho lo posible con el presupuesto que teníamos, no como otros que prometen lo que no tienen y engañan a los jugadores. Esos equipos son los que deberían descender, los que no cumplen económicamente con su plantilla. Los que prometen 5.000 euros y no cumplen. Nosotros sí tenemos sólo para darles 1.000 euros, pues les prometemos eso y se lo damos. ¿No hubo forma de enderezar el rumbo en algún momento? Pedimos ayudas muy pequeñas antes de que esto pasara y no nos respondieron. Nos quedamos solos, como casi siempre e hicimos lo que estuvo dentro de nuestras posibilidades. Pero siempre hemos sido el equipo de ahí abajo, del sur de Tenerife. Los pobrecitos. ¿Y ahora qué? Hemos llegado callados y nos vamos a ir callados. No vamos a salir en la prensa diciendo que nos retiramos para que los políticos de la capital nos apoyen como han hecho otros. Hay que estudiar un poco las circunstancias y tomarnos un período de reflexión de tres meses para analizar si merece la pena seguir adelante en un proyecto como este, al que la mayoría de la gente ha dado la espalda. ¿Quién le ha fallado al Tenerife Sur Arona? No es el momento de ir contra nadie. Somos dos personas, Eulogio Hernández y yo, y tenemos que ver si merece la pena seguir sacrificándonos porque nuestro club siempre ha estado infravalorado. Estando en el sur de Tenerife todo es más difícil. Creamos un club de la nada, empezando por un equipo juvenil, que ha sido campeón de Primera, de Liga FEV, ascendiendo a Superliga, donde luego ganó una Copa y una Supercopa. En juveniles y cadetes también hemos logrado títulos nacionales. Para un municipio como Arona esto es muy importante y no se ha valorado. Es en este momento, cuando se ha producido el descenso, cuando la gente se va a dar cuenta de lo que ha perdido. ¿Cree que en Arona se han percatado ya de lo que supone el descenso de este club? No sé si ya, pero la gente se terminará dando cuenta de lo poco que ha apoyado a este equipo, el único de élite que hay en la zona sur de Tenerife. Eulogio y yo hemos nadado contracorriente mientras hemos podido. Ustedes siempre se han quejado del poco apoyo que tenían en comparación con los equipos femeninos de voleibol Es verdad que teníamos que estar detrás de los éxitos del CV Tenerife. Con eso no podíamos luchar porque ha logrado títulos nacionales y ha sido campeón de Europa. Pero siendo equipo masculino, hemos sido maltratados porque sólo queríamos lo mismo que los clubes femeninos. A nivel de esponsorización, nos hemos visto abandonados en el sur. Los políticos fuertes piden ayuda para los equipos de Santa Cruz y La Laguna y nosotros nos quedamos sin nada. En la prensa también hemos salido poco, salvo cuando nos hemos quejado. ¿Qué van a hacer hasta que acabe la temporada? Vamos a solucionar los pagos y dejar el club a cero en deudas. Es así como trabajamos. No queremos estar llorando ni pidiendo favores para arreglar agujeros. En unas semanas todo quedará cerrado y entonces nos plantearemos si la continuidad del club es buena o es mejor dar un paso al costado. ¿Hay alguna posibilidad de mantener la categoría por otros métodos? Sin ir más lejos, se ha hablado de modificaciones en la competición y hasta de posibles renuncias por razones de índole económica. Se ha hablado de catorce equipos en Superliga, algo que veo improbable. Pero también te digo que hay algunos que van a descender porque económicamente no serán viables la temporada venidera, ya que cuentan con un presupuesto que no van a poder cumplir. Nosotros, en Superliga o Superliga 2, podríamos seguir adelante porque no arrastramos incumplimientos.