La etóloga visitó una de las zonas afectadas por el incendio de Tenerife. Allí, ha sido informada de las características con las que cuenta el pino canaria, destacando su resiliencia contra el fuego.

Tras sacar una foto en el tótem de Fénix Canarias junto a su mono de peluche, Goodall plantó un palo blanco en el lugar. La científica se 'manchó' las manos para poner la tierra y al finalizar le da un beso al árbol para que capte su energía.