El ministro de Justicia, Alberto Ruíz-Gallardón siempre lo repitió: la nueva ley del aborto no era sólo cosa suya y por eso la defendió durante tres años. Así que tras la aprobación del anteproyecto hace nueve meses, empezó una cuenta atrás a la que el propio Gallardón puso fecha: "Antes del verano." Y desde el Gobierno mantenían su discurso oficial: "Desde el principio el gobierno quiso trabajar por el consenso y es lo que está haciendo".