Últimas directrices en este colegio electoral de Vigo, uno de los más de 2.500 dispuestos en estas autonómicas gallegas. Todo estaba listo aquí, en el Ayuntamiento vigués, minutos antes de las 9 de la mañana: mesas constituidas, un mantel de papeletas -hay 74 candidaturas en estos comicios- y los nervios lógicos de los que se estrenan, que contrastan con la tranquilidad del experimentado. Cerca de 2,7 millones de gallegos, incluídos casi 400.000 residentes en el extranjero, eligen a su noveno Parlamento.