Los terroristas de los atentados de Bruselas pudieron haber orquestado la matanza en el sótano de un edificio de la ciudad, concretamente en el barrio de Schaerbeek. Un lugar en el que pasar desapercibidos y en el que poder fabricar las bombas sin levantar sospechas. Unos explosivos, que probablemente se prepararon en el sótano del edificio. Ayer, la policía belga registró minuciosamente todo el bloque para encontrar cualquier pista.