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Una afición un tanto arriesgada

Pensaran que este hombre va a pescar un pez cualquiera, pero nos sorprende y saca del mar nada más y nada menos que un tiburón de 7 pies de largo, más de dos metros. Elliot Sudal, tiene una afición muy peculiar, cuando va a la playa no solo se tumba a disfrutar del mar y del sol. A Elliot le gusta capturar tiburones y después de sacarse una foto con ellos, devolverlos al mar. Este joven de 24 años que recientemente se ha mudado a Massachusetts, ha capturado unos 100 tiburones con sus propias manos. A pesar de que sea arriesgado, para Elliot este es su pasatiempo favorito.