El FC Barcelona ha vuelto al trabajo tres días después de que el presidente del club, Sandro Rosell, anunciara que Tito Vilanova tenía que abandonar el club para someterse a un tratamiento contra el cáncer que le resultaba totalmente incompatible con su cargo. La sesión, que se celebró a puerta cerrada, ha tenido lugar en la Ciudad Deportiva Joan Gamper y ha estado dirigida por el Jordi Roura y Rubi y ha contado con la participación de los 12 jugadores disponibles del primer equipo y los 11 del filial.