Los abogados defensores de algunos de los acusados en el caso de la cría y la organización de peleas de perros potencialmente peligrosos destapado en Tenerife en febrero de 2017 han mantenido un encuentro con la fiscal que lleva el asunto con el objetivo de llegar a un acuerdo de conformidad. A través de esta medida, dichos implicados reconocerían su culpabilidad, a cambio de que las penas que se les impongan no implique su entrada en prisión o no sean tan elevadas como proponen en estos momentos el Ministerio Público y la acusación popular, ejercida, entre otras, por el antiguo grupo de Podemos en el Cabildo de Tenerife.
Además, si se llega a la mencionada conformidad, el juicio no se celebraría para quienes reconozcan tal culpabilidad y en su caso la sentencia sería firme, es decir, no cabría interponer recurso alguno.
Por ahora, la abogada de la acusación popular ejercida por el antiguo grupo de Podemos en la corporación insular tinerfeña se va a oponer a tal acuerdo de conformidad y va a mantener las peticiones de pena, que en todos los casos de los presuntamente implicados en la trama en Tenerife son más elevadas que las planteadas por la Fiscalía.
Algunas asociaciones animalistas han reaccionado a esta novedad con algunas iniciativas, como iniciar una recogida de firmas en la plataforma change.org para tratar de impedir la no celebración de la vista y, sobre todo, la rebaja considerable de las condenas.
Cabe recordar que el juicio está previsto que comience el próximo lunes en la Sección Decimosexta de la Audiencia Provincial de Madrid, después de que la causa fuera llevada por el Juzgado de Instrucción número 3 de Torrejón de Ardoz.
La investigación fue hecha por la Unidad de Delincuencia Económica y Violenta (UDEV) de la Policía Nacional. Los agentes centraron sus pesquisas, en un primer momento, en un vecino de Madrid, Ángel Ortega, a quien no se le conocía trabajo o actividad empresarial alguna, pero que supuestamente dedicaba unos 6.000 euros a comida para perros cada mes. Ortega, también conocido como El Maestro, está considerado el líder a nivel nacional de esta organización, según la Policía.
Y en febrero de 2017 realizó un viaje a Tenerife para participar en la final nacional de estas competiciones. El grupo que operaba en la Isla alquiló una casa en La Medida (Güímar), para celebrar el evento la noche del día 18 de ese mes.
Y ese fue el enclave elegido por los investigadores para reventar la operación. La intervención generó un gran impacto en la sociedad. Un arrestado fue un policía local de Adeje, F.C.G., a quien se le consideraba hombre de confianza del cabecilla de la trama en Tenerife, E.P.C. Según las fuentes consultadas, dicho agente lleva varios años suspendido de empleo y sueldo en el Ayuntamiento de Adeje, por lo que solo cobra las percepciones básicas que por Ley le pertenecen.
