Lo primero que hay que tener en cuenta cuando existen conflictos en una relación de pareja, es que no hay ni ganadores ni perdedores. Si se quiere mantener una estabilidad, es necesario saber escuchar a la otra persona y dar pequeños pasos para que las discusiones no se incrementen. En “El Camino de la Seducción” podrás encontrar más consejos sobre las relaciones de pareja.

Es cierto que cada persona actúa de una forma, llegando a encontrar parejas que son como un volcán que está a punto de estallar. Nadie niega que no sean felices juntos, pero están continuamente discutiendo por todo. En todas las relaciones se discute, es un factor inevitable, pero debe conllevar a la construcción de una relación más fuerte y estrecha.

Cuando esta situación roza el límite, llega la idea de querer separarse, haciendo que ambas partes pasen por un momento muy delicado en el que cualquier error, por pequeño que sea, pueda ser la gota que faltaba para que el vaso se desborde.

¿Cómo pueden solucionarse los conflictos de pareja?

Cuando se pasa por una etapa de pareja mala, es normal ver a los miembros de la relación felices un día y al otro, tristes, dependiendo del estado de ánimo que exista con su pareja y si han discutido recientemente.

Lo importante es que ambas partes sepan que no se puede vivir así, por muy bonito que fuera todo al principio, es necesario tomar las soluciones necesarias y mirar por ti mismo, por tu futuro, pensar si de verdad eso es lo que quieres para ti con el paso de los años.

A la hora de compartir la vida con una persona, es normal que aparezcan conflictos cotidianos, normalmente por cosas insignificantes, como que una parte tenga ganas de ir al cine, y la otra de quedarse en casa.

De este modo, debes de saber que cualquier convivencia conllevará a conflictos inevitables, de los que tendrás que aprender para poder evitar transformar las discusiones en peleas. El daño que se hace en el presente, puede repercutir en el futuro, y la relación de pareja no es la excepción.

A la hora de discutir, hay que intentar mantener las formas con la que se hacen, las palabras hacen mucho daño y pueden llegar a ser un consideradas hasta un arma que termina marchitando el amor y la energía que se sentía por la relación.

Intenta evitar las acusaciones tipo: “tú hiciste...” o “tú eres...”, ya que no ayuda en nada echar cosas en cara a la otra persona. Céntrate en intentar explicar de la mejor forma posible lo que te pasa, por qué no estás a gusto o qué te molesta de la otra persona.

La búsqueda de soluciones es el factor más importante, es necesario orientarse hacia la dirección indicada, donde ambas partes desempeñen una función. Por norma general, todo el mundo piensa en “ganar” una discusión, sin tener en cuenta que a la larga la van a “perder”.

Las relaciones de pareja son complicadas, motivo por el que hace falta que ambas partes pongan todo su empeño en intentar solucionar los problemas de pareja lo antes posible.