El papa denunció hoy la existencia de una "verdadera deuda ecológica" entre el norte y el sur, creada por desequilibrios comerciales consecuencia de la explotación de recursos naturales por parte de algunos países.

"Las exportaciones de algunas materias primas para satisfacer los mercados en el norte industrializado han producido daños locales" como la contaminación por la extracción de oro y cobre, destacó el pontífice.

"Con frecuencia las empresas que obran así son multinacionales, que hacen aquí lo que no se les permite en países desarrollados", dijo el papa en su encíclica sobre protección del medioambiente "Laudato si", publicada hoy.