El transbordador Atlantis completó ayer su pirueta de inspección en torno a la Estación Espacial Internacional (EEI) y comenzó a alejarse del puesto orbital por última vez con rumbo a la Tierra, informó la NASA.

La nave, con cuatro astronautas a bordo, soltó amarras de la EEI, donde residen otros seis tripulantes, e inició un vuelo de 360 grados, mostrando su parte inferior para la inspección ocular desde la estación.

El propósito es determinar la condición de los paneles térmicos que revisten la cubierta, el borde delantero y la superficie de las alas que protegen al transbordador cuando, al entrar en la atmósfera a su retorno, se somete a una temperatura de unos 2.000 grados.

Casi dos horas después, cuando completó la pirueta, la nave empezó a alejarse de la EEI, mientras ambos aparatos orbitaban la Tierra a unos 27.000 kilómetros por hora.

Esta previsto que el "Atlantis" tome tierra mañana, con lo que pondrá fin a 30 años de misiones de los transbordadores de la NASA.