El Ayuntamiento de Santa Cruz ordena al parking público situado entre el puente Serrador y el Mercado Nuestra Señora de África que reduzca la tarifa que cobra a los ciudadanos en un 66%, es decir, más de la mitad, de manera que pase de los 1,96 euros por hora que se exigen en la actualidad a 1,18. El Consistorio le da un mes de plazo a la empresa responsable del citado estacionamiento para que proceda a modificar el precio. Así se establece en el primer «informe propuesta» elaborado por Servicios Públicos a raíz de la inspección realizada a siete aparcamientos subterráneos de la capital con concesión administrativa.
En la citada inspección, y según lo adelantó EL DÍA en noviembre del año pasado, Servicios Públicos detectó que los siete parking públicos de la ciudad analizados «están cobrando a los clientes más de lo que deberían, superando las tarifas estipuladas en los contratos que se firmaron en su momento con el Ayuntamiento, a través de concesiones administrativas, para la explotación de dichos estacionamientos subterráneos». En algunos, incluso, casi se duplica la cantidad que tendrían que pagar los ciudadanos, como es el caso del situado entre el puente Serrador y el Mercado.
Asimismo, se detectaron incumplimientos en cuanto al canon que se debe abonar al Consistorio por la gestión de los parking, ya que, «en la mayoría de los casos, las empresas pagan menos de lo establecido». Los siete aparcamientos que han sido inspeccionados son los que se encuentran ubicados en la plaza de España-avenida de Anaga; en Tomé Cano; en la plaza Weyler; en el Estadio Heliodoro Rodríguez López; en la calle de El Pilar; en Ramón y Cajal, y el citado, el situado entre el puente Serrador y el Mercado Nuestra Señora de África.
Servicios Públicos incoó los correspondientes expedientes y éstos fueron notificados a los siete estacionamientos, abriéndose un periodo de presentación de alegaciones. Las empresas alegaron que las actualizaciones de los precios fueron autorizadas por el propio Ayuntamiento por no pronunciarse nunca al respecto, por silencio administrativo.
Expresamente
«Año tras año se ha solicitado permiso para actualizar las tarifas, sin que en ningún caso el Consistorio se haya pronunciado en contra», se señala en la mayoría de las respuestas de los parking. Sin embargo, Servicios Públicos deja claro que para modificar el precio era necesario que la solicitud fuese aprobada «expresamente». Con respecto al canon, algunas entidades reconocen que «se ha producido un error» y están dispuestas a abonar la diferencia.
Finalizado el periodo de alegaciones y una vez analizadas, Servicios Públicos ha comenzado a emitir los correspondientes informes propuesta, en los que ya se establecen las conclusiones y el Ayuntamiento ordena la regularización de las tarifas y del canon. El primero ha sido el correspondiente al aparcamiento del puente Serrador. «Se ha realizado un trabajo exhaustivo, detectándose incumplimientos. Ya se ha emitido, y notificado, el primer informe con las medidas que se deben aplicar. En las próximas semanas, iremos sacando el resto de informes para el resto de parking, pero prácticamente van en la misma línea», ha explicado el concejal responsable del área, Carlos Tarife, del PP.
Éste señala que el objetivo de esta inspección no es otro que, por un lado, regularizar las tarifas, «para que éstas sean más atractivas para el ciudadano y más acordes a las distintas concesiones que se otorgaron en su momento», y, por otro, «regularizar el canon que se debe pagar al Ayuntamiento por parte de las empresas». De todas formas, añade Carlos Tarife, «Servicios Públicos está dispuesto a negociar con los parking, siempre y cuando se cumpla con lo estipulado en los contratos».
Con respecto al estacionamiento del puente Serrador, el Ayuntamiento indica que la concesión fue adjudicada en 1998 para la explotación de 610 plazas, estableciéndose una tarifa de 120 pesetas la hora (0,72 euros). En 2006, la empresa propuso la revisión automática de las tarifas cada año y en base al IPC (Índice de Precios al Consumo). En aquel entonces, ésta ascendió a 1,40 euros. No se dictó resolución expresa por parte del Ayuntamiento. Los precios siguieron aumentado hasta alcanzar en 2021 los 1,96 euros la hora, lo que supone un 254% más con respecto a la tarifa inicial.
En el informe se establece que «no se justifican los cálculos realizados para obtener la tarifa aplicada, así como el importe del canon a abonar». «La tarifa actualmente aplicada por el concesionario es superior a la tarifa máxima aplicable, resultante de la actualización derivada de la variación del IPC». En concreto, cobra más del doble de lo que debería, según el Consistorio capitalino, un 66,47% más.
Con respecto al canon, el informe concluye que la empresa debe al Ayuntamiento 46.578 euros, más 2.748 euros en intereses. Y fija el canon trimestral en 4.009 euros, en lugar de los 3.751 que estaban abonando.
