El monumento a la Victoria, situado en la santacrucera avenida Francisco La Roche (avenida de Anaga) y conocido como monumento a Franco, ha sido incluido en el catálogo que ha elaborado el Gobierno de Canarias sobre los símbolos ilegales que existen en la capital tinerfeña por incumplir la Ley de Memoria Histórica. El citado catálogo, que recoge numerosos símbolos, calles, monumentos y menciones franquistas que aún existen en Santa Cruz de Tenerife, y con el ya se podrá llevar a cabo cualquier labor de retirada o de resignificación de estos elementos, será presentado mañana miércoles, según han señalado fuentes del Ejecutivo canario.
Este anuncio se produce justo en medio de la polémica desatada a raíz de que el área de Servicios Públicos en el Ayuntamiento de Santa Cruz, que dirige el edil Guillermo Díaz Guerra, del PP, haya adjudicado a una empresa, por un presupuesto de 13.000 euros, la redacción de un proyecto para la reparación de la fuente del citado monumento a Franco. El portavoz del Partido Socialista en el Consistorio chicharrero, José Ángel Martín, tacha de «desfachatez» que el grupo de Gobierno (CC, PP y la edil de Cs Evelyn Alonso) «gaste dinero en este estudio cuando saben perfectamente que no se puede arreglar nada, pues el monumento al que pertenece la fuente incumple la Ley de Memoria Histórica y tendrá que ser retirado».
Con respecto al catálogo que presentará mañana el Gobierno de Canarias sobre los símbolos ilegales que existen en Santa Cruz, el concejal socialista destaca que dicho documento «nos marcará lo que debemos hacer con este monumento, el cual incumple dos leyes, la regional y la nacional, y con el resto de símbolos franquistas que aún existen en este municipio, y ya no podrá haber excusas por parte del grupo de Gobierno» del Ayuntamiento de la capital. De todas formas, denuncia Martín, «el Consistorio podría haber actuado desde hace tiempo, pues ya un estudio encargado por el PP en el anterior mandato concluía que el monumento a Franco de la avenida de Anaga debía ser retirado».
«Sin embargo, los únicos que hicimos algo fuimos nosotros cuando estábamos gobernando, con la alcaldesa Patricia Hernández al frente. Todos los grupos políticos acordamos por unanimidad que el monumento incumplía la ley y que algo se debía hacer. Iniciamos los pasos, pero luego llegó la moción de censura y ya no se hizo nada», explica a EL DÍA José Ángel Martín.
Este asegura que para el PSOE ha sido una desagradable sorpresa el anuncio de la redacción del proyecto para reparar la fuente. «No entendemos a qué viene esto ahora. Además, hace tiempo se realizó un estudio que decía que la reparación de la fuente podría costar más de medio millón de euros. Lo que han hecho es un brindis al sol, pues saben que ese proyecto no se puede ejecutar», agrega.
