Nuestro escultor nació un 15 de enero de 1948 en el barrio de la Vera, con el tiempo pasó a vivir al barrio de San Antonio, de Puerto de la Cruz. Es un hombre norteño, escultor, con manos de cirujano, que ha dejado su firma en su arte. Hoy vamos a tener el placer de conocerlo, desde su nacimiento hasta los días de hoy.

Don Pablo Martín Abrante es un escultor, afincado en la Villa de la Orotava, donde tiene su estudio y taller. Esta es su historia contada por el propio protagonista, Don Pablo.

La profesión desde la niñez

“Siempre vi la madera en mi casa, con siete años, observé cómo mi abuelo materno fabricaba su propio bastón: cogió tres piedras, hizo un fogón y calentó agua y sumergió un palo (sería de morera o brezo); lo sacaba del agua caliente, doblaba un poco el palo varias veces hasta que ya tenía la forma de bastón. Luego, con cristal de botella lo pulía y terminaba cogiendo una lona de calzado vieja, y cortaba un círculo que clavaba en la parte inferior. Recuerdo esto, con mucho cariño, ahí aprendí que con las manos se pueden hacer maravillas. Además, mientras yo iba creciendo, mi hermano mayor, Juan, aprendía la ebanistería y tallado en un taller cercano a nuestro domicilio, era el de Don Pedro, en la Cooperativa La Higuerita. Allí aprendieron todos los buenos ebanistas y tallistas de la zona. Veía trabajar a mi hermano en casa y cuando necesitaba que alguien le ayudara con una sierra de mano para rodear patas estilo Luis XV, yo le ayudaba. Cuando regresó de la mili montó una ebanistería en la Longuera, y yo estudiaba en la escuela de La Campana. Tenía un gran amigo de clase, Juan Cruz, que era el número uno de la clase. Él tomó otro camino y yo el mío, fui a aprender a la ebanistería artística con mi hermano. Con los años, viajé a Venezuela, y en Caracas, a los 20 años; ya tenía mi propia ebanistería, cuya razón social fue Longuera S.L., destinada a la fabricación de muebles, muebles al estilo Luis XV”.

Pablo Martín Abrante. El Día

Estudios y profesión

“Estudié Bellas Artes en Caracas, Venezuela, y ejercí mi primer trabajo, a los 15 años, una pequeña obra de arte, un joyero. Fue un regalo con todo mi amor para Felicidad Escobar A., una bella villera que conocí en la plaza del quiosco en 1962. Es mi esposa y madre de mis tres hijos. Ella es restauradora de obras de arte, entre ellos puedo citar el retablo de San Sebastián en Santa Cruz, la pintura y el Pan de Oro; en Icod el Alto restauró la pintura y Pan de Oro. En San José de los Llanos, restauró el Pan de Oro del retablo, y así muchos más. Estamos escribiendo un libro...”

Diseño y ejecución en el trabajo

Si me traen un boceto lo estudio y si no lo traen yo se los realizo. Puedo contar una anécdota, vino un señor y cuando nos sentamos a hablar del trabajo que quería encomendarme, lo primero que le pregunté fue si traía su idea plasmada en algún dibujo, respondió que no. Mientras conversábamos, yo le iba realizando el dibujo de cara hacía Él. Y bastó esta técnica para que el buen hombre no me dejara terminarlo sino que lo diera por bueno. Si era capaz de hacerle el dibujo de aquella forma, sería capaz de hacerle el trabajo que me quería encomendar”.

Trabajo de la madera

“En obras de arte, se utiliza maderas amargas, cedro y caoba, para que no le entren las termitas, u otra; las maderas de color todas son buenas para muebles”.

Trabajos para distintos países

“He realizado trabajos para Bélgica, Portugal, Venezuela y toda Sur América”.

Tipo de escultura

“La mayoría de mis obras se caracterizan por ser de temática religiosa. Siempre parto de que hay que hacer un boceto en terracota para imágenes. En retablos les hago el plano o lo traen hecho, y esto se lleva a la escala necesaria, y luego, manos a la obra, comienzo a trabajar con una maza, gubias, buriles y formones. Tengo un estilo propio, lo que hago se reconoce por el tipo de tallado. Todos los trabajos tienen algo en común, y es la forma y la profundidad que alcanzan mis tallas. Me gusta detenerme en todos los detalles. Si se trata de personas hay que saber captar lo más mínimo por pequeño que sea. Por ejemplo, en el cuadro de la última cena me felicitó un médico amigo por lo bien que había manejado en dicho cuadro los elementos de anatomía. Me gusta colaborar con algunas causas, así doné la mano de obra en el Mausoleo para el Padre Antonio en Santa Rita II”.

El arte en casa y en el corazón

“Mi casa es una exposición permanente, desde las puertas de la calle hasta la cocina. Hago mi trabajo con sentimiento y amor profundo. Lo confieso, soy un enamorado de mi profesión”.

Exposiciones

“He participado en distintas exposiciones. En Santa Cruz de Tenerife, Colegio Asuncionista y Colegio San Pablo C.E. U. En la Laguna, antigua sede de lo que fuera Caja Canarias y en San Benito. Liceo Taoro, en La Orotava, a beneficio de reconstrucción de la Iglesia de Buenavista. En el Liceo de la Orotava, en el año 1992 se hizo una exposición colectiva de todos los ebanistas, tallistas y escultores del Valle de la Orotava. En la Guancha en 1988, con los mejores pintores de Canarias, entre ellos César Manrique. También en otros municipios como Tacoronte, La Matanza, Santa Úrsula, La Orotava, Pinolere, San Antonio, La Perdoma, La Guancha, Icod de los Vinos, Garachico, Santiago, del Teide, Guía de Isora. Fundamentalmente existe una exposición permanente en Iglesias, tales como Santa Rita, Punta Brava -Los Realejos, San Antonio-Puerto de La Cruz, San Pablo-Las Dehesas, La Vera-Puerto de La Cruz (dos tronos y ménsulas de Santa Rita y hermano Pedro y trabajo en sacristía); en los Realejos (el Toscal, Realejo Bajo, Palo Blanco, Icod el Alto); La Rambla, San José de los Llanos, el Tanque bajo, San Felipe Neri Icod de los Vinos; en Santa Cruz, Chamberí, Valle Seco y San Sebastián; en Candelaria, Santa Ana; El Socorro, Tegueste; Centro artesanal La Guancha; Catedral de la Laguna; Santa Rita II (Mausoleo Padre Antonio); Centro Cultural La Guancha (escudo en la fachada), Santo Domingo y San Agustín en La Orotava. Auténtica exposición en la calle en la Semana Santa en La Orotava, trono Domingo de Ramos, Realejo Alto, trono Señor del huerto, La Guancha y Chío, una urna del Señor Muerto, Realejo Bajo, techo de la urna y parte baja, y trono de María Auxiliadora en La Orotava, trono Señor del Calvario, Icod de los Vinos”.

Docencia, ebanista, tallista y escultor

“En Venezuela, mi taller era una escuela. En La Guancha, di varios cursos en los años 85, 86, 87 y 88. El ebanista suele hacer muebles, El tallista puede ser ebanista, y el escultor se dedica más al arte de las bellas artes. Me fui con 18 años a Venezuela. Allí tuve grandes profesores de la escultura. De regreso, a Canarias me descubrió el Padre Antonio y me dijo que no encontraba quién le hiciera un Sagrario con la última cena, le mostré una foto de la última cena de Juan de Juanes del Museo del Prado y me dijo: ‘solo quiero que pongas doce columnas en el cuadro que simbolicen el sostén de la Iglesia Católica’. Hoy se puede disfrutar en La Iglesia de Santa Rita, en Punta Brava, Puerto de la Cruz. El hermano del Padre Antonio, Ángel, me pidió que fuera yo el autor de su Mausoleo, en la Iglesia de Santa Rita II. Llevo 58 años dedicado a esta profesión a la que amo tanto”.