CANARIAS 19·20 es una experiencia en los espacios de la memoria, la memoria que el arte realizado en Canarias durante un siglo y medio ha materializado en las obras de veintidós artistas que forman parte de la tradición insular. No son, por tanto, artistas desconocidos en nuestro ámbito cultural (aunque a algunos el tiempo los invisibilice más que a otros) pues, a excepción de Alejandro Ossuna y Saviñon, todos los representados en esta muestra cuentan ya con una monografía sobre su vida y su obra en Biblioteca de Artistas Canarios (BAC), que desde 1991 viene editando el Gobierno de Canarias y que este año cumple su trigésimo aniversario. (Así que, sin premeditación ni alevosía, sea CANARIAS 19·20 por añadidura el primer brindis celebratorio de tal efemérides.)

Entre 1811, año del nacimiento de Alejandro Ossuna, y 2016, el de la muerte de la escultora Maria Belén Morales y de Pedro González, con la venturosa salvedad de Maribel Nazco y Cristino de Vera ambos en activo, se desenvuelve esta exposición. Entremedio: Nicolás Alfaro, Valentín Sanz, Juan Botas, Nicolás Massieu y Matos, Francisco Bonnín, José Aguiar, Pedro de Guezala, Manuel Martín González, Vicki Penfold, Juan Ismael, Felo Monzón, Plácido Fleitas, Manolo Millares, Martín Chirino, Cesar Manrique, Lola Massieu y Baudilio Miro Mainou.

Si como hemos advertido CANARIAS 19·20 es una invitación a la memoria, el tránsito por la treintena de obras que la constituyen -algunas mostradas por primera vez en años- no debería ser pasivo, lleva parejo un cierto ejercicio de "reconstrucción" donde los vínculos posibles o imposibles, esenciales o anecdóticos, visibles o invisibles que alumbramos en su recorrido son la sustancia y alimento de nuestra experiencia.