Con cariño y respeto, pero sin ánimo de polemizar.

Intentaremos ir dando respuesta a cada uno de los apartados del escrito, en pro de la transparencia y con el objetivo de que la ciudadanía se forme su propio criterio y haga su valoración.

En primer lugar, hay que decir que el velatorio no es un tema nuevo de este año. Venimos hablando, dando nuestras opiniones, y denunciando la situación desde que comenzó.

Evidentemente, nuestra Asociación lo tiene como un tema importante y destacado, pues sabemos que ahora hay que intentar pararlo y que los promotores cambien de idea. Si se termina construyendo será imposible volver atrás y ocurrirá como con muchos otros asuntos en esta ciudad. Ponemos ejemplos de oposición vecinal a temas que hoy son realidad. Por ejemplo, los juzgados de la plaza del Adelantado, la nueva estación de guaguas, la rotonda del Padre Anchieta, todos desaguisados cuestionados por la ciudadanía.

Pese a que nos faltan manos, pero nos sobra ilusión y ganas, esta Asociación sigue afrontando otros temas de mucho interés para mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas. Problemas en las peatonales, estado de vías y aceras, redacción de ordenanzas, el ruido, los músicos callejeros, los servicios sociales, hogar de la tercera edad...

También intentamos colaborar en dar esplendor y hacer participativas nuestras fiestas del Cristo (concurso de fotos antiguas y maratón fotográfico), de San Benito (concurso de decoración de ventanas y balcones€).

Intentamos aportar ideas y sugerencias en los foros y consejos, sin olvidar el patrimonio cultural tan rico de nuestra ciudad, dando a conocer y poniendo en valor temas como el Alverres, oficios en desaparición, vivencias de las lavanderas€

Como bien dice usted al final del escrito, nuestra implicación en los asuntos relacionados con la ciudadanía está fuera de toda duda, lógicamente con objetivos claros, compartidos por muchos ciudadanos y ciudadanas y en especial por nuestros asociados y asociadas, lógicamente con aciertos y errores, pero con claridad, constancia y energía.

En otro apartado del escrito, dice que no nos hemos definido sobre el velatorio de los Hermanos Betlemitas en la calle Bencomo. Como bien sabe usted, lleva más de 30 años funcionando y sería imposible oponernos, pues tiene derechos adquiridos; aun así, su ubicación es en una calle, ha sido remozado y cumple ampliamente sus funciones para las necesidades del Casco Histórico.

Don Eliseo en su escrito pide que expliquemos a qué tipo de desaguisado nos referimos al calificar esta obra. Pues bien, nos reafirmamos en que es un desaguisado, no es un desaguisado legal, pues tiene sus permisos, aunque desde nuestro punto de vista, su concesión no se hizo de forma transparente y abierta, que es lo que se merece y exige la ciudadanía.

Como bien sabe usted, pues imaginamos que participó como miembro de la Comisión Insular de Patrimonio, el Plan Director del Espacio Monumental del convento de San Miguel de las Victorias, donde se encuentra el Santuario del Cristo, databa del 2010 y fue modificado en 2017 a solicitud de la Esclavitud. Donde se está construyendo el velatorio, en los locales antiguos que lindan con la plaza y fueran espacio-almacén de material de las fiestas del Cristo, estaba previsto adecuarlo como museo del Cristo, donde se expondrían las piezas que muchos devotos y devotas han donado. También se buscaría un sitio para la tienda de recuerdos, souvenirs€

El cambio de plan director, proceso del que ni se dio difusión ni se informó a la ciudadanía, provocó que en ese espacio en vez de museo aparecieran las palabras servicios sanitarios.

Este expediente, según parece ser, no se aprobó de forma unánime. Aun así, la consejera de Patrimonio firmó el acuerdo. El camino quedó abierto.

A los pocos meses, se presentó el proyecto de construcción del velatorio.

Paralelamente a este proceso, la Esclavitud inscribe para sí como propiedad los salones ocupados por la Delegación de Fiestas. Esta Asociación pidió al Ayuntamiento que se presentara como parte interesada; pues bien, la respuesta fue "no ha lugar" y se registraron para la citada Hermandad.

En esa época, la Esclavitud presentó el proyecto a nuestra Asociación y después de analizarlo dimos nuestro No a la construcción del velatorio.

Son varias las razones y aprovechamos la ocasión para exponerlas a continuación:

— Es precisamente la plaza del Cristo un espacio cívico de carácter cultural y patrimonial que identifica a la cuidad, considerada de interés cultural, la que se verá ocupada por coches fúnebres que entren y salgan del velatorio (cinco salas). Imaginamos por ejemplo a nuestros hijos/as, nietos/as con las bicis o patinetes disfrutando de la plaza, una concentración deportiva, un concierto de rock, una boda o un mercadillo... compartiendo esta actividad con el velatorio. Aunque sabemos que la muerte es un hecho natural, sí conlleva tristeza y recogimiento de familiares y amigos.

— El aparcamiento público -por cierto, bien gestionado por Muvisa- que se encuentra en los bajos de la plaza está de por sí colmatado; se ha visto más utilizado desde que se inauguró el centro de salud. La presencia del velatorio privado, que no tiene previsto la creación de plazas de aparcamiento propias, acarrea un mayor problema, pues aumenta su ocupación.

— No vemos acertada la presencia de un velatorio en un futuro equipamiento que se piensa hacer en el antiguo cuartel del Cristo cuando pase a la ciudad.

— También hay que decir que no nos parece acertada la utilización del Santuario y la imagen del Cristo como reclamo a un negocio privado. Según el hermano mayor de la Esclavitud, Mémora, la empresa encargada de la construcción y explotación, entregará un mínimo de 70.000 euros anuales a la Hermandad.

— Un desaguisado medioambiental, pues sí; porque en un futuro, si el cuartel del Cristo pasa a la ciudad y se quiere dedicar como equipamiento en el gran pulmón verde (plaza del Cristo, cuartel, camino Las Peras, parque La Vega), un velatorio no encajaría.

— Creemos que es un desaguisado urbanístico y paisajístico en el sentido que se levantará una estructura de dos alturas en el interior de un conjunto monumental de importancia, que, desde nuestro punto de vista, rompe la armonía del entorno.

— Argumenta la Esclavitud que hace falta el velatorio por interés general, al no existir ninguno moderno ni en condiciones de accesibilidad en el casco; como se ve, este argumento no es verdad. Pues sí existe. Aun así, nosotros pensamos que los velatorios-tanatorios -es decir, los servicios funerarios- han de estar a las afueras de la ciudad. Por ejemplo, junto al cementerio de San Luis, pues el actual velatorio está bastante anticuado.

— Así se lo expusimos a la Esclavitud y no lo vio el esclavo mayor, pues, según él, allí no estaba el Cristo, muestra evidente de la utilización que se hace de la imagen y el fervor que despierta con un fin lucrativo.

— En varias sesiones del pleno municipal se debatió el estado de la plaza del Cristo y nosotros como Asociación expusimos nuestra opinión.

— Hablamos de las diferentes reformas de la plaza, la desaparición del torreón y luego la fuente monumental, la colocación de los cuatro postes y al final la colocación provisional de la Recova.

— Pese a la oposición de una parte de la ciudadanía, la corporación anterior concede la licencia (legal) de obra, vísperas de las elecciones, pese a existir el compromiso y acuerdos plenarios de llevar el tema al Consejo Municipal de Patrimonio y a una posible consulta.

— Tenemos en este punto que mencionar que no es solo nuestra Asociación la que se opone. También se han manifestado en contra otros colectivos como las asociaciones de vecinos El Bronco-Lomo Largo, San Roque, San Diego, Jardina y Ruala, CEC Nivaria, Federación Vecinal Aguere y cientos de firmas de ciudadanos.

— La Esclavitud también dice que el velatorio dejará fondos para afrontar dos cuestiones:

- La labor social que realizan, labor que nos consta que es importante y que nosotros valoramos, pero, si se montara el museo y la tienda, con el cobro de una entrada y las ventas, teniendo en cuenta el número de visitas, creemos que se conseguirá una cantidad considerable para afrontar esta labor. También se recaudaría con el columbario previsto en la pared del Santísimo.

- También dice que el velatorio dejaría fondos para reparar y mantener el patrimonio. De todas formas, hay que decir que la restauración y mantenimiento de este patrimonio recibe apoyo de las instituciones, la última ha sido de 1.800.000 euros de dinero público.

— Nuestra intención a la hora de escribir este artículo es simplemente la de informar e intentar convencer a la Esclavitud y también a sus miembros de que el velatorio en la plaza no es adecuado y que todavía se está a tiempo de evitarlo.

— Por descontado que las personas que han seguido la trayectoria de esta Asociación desde su nacimiento saben que somos respetuosos, democráticos, aceptamos las críticas, trabajamos la solidaridad, la tolerancia y la igualdad (cuestiones que al parecer, la Hermandad no cree).

— Solo dejar claro que, si una persona está en una institución que hace una actuación importante con la que no está de acuerdo, si la acepta, también será partícipe y responsable de dicha actuación.

Los ciudadanos tenemos el derecho y el deber de exponer nuestras opiniones; los políticos toman decisiones después de considerar los informes de los técnicos y de recoger el sentido manifestado por la ciudadanía. Las actuaciones de los políticos de espaldas a lo que piensan los vecinos crean desánimo y desconfianza. El voto de la ciudadanía no es un cheque en blanco, por lo que sus decisiones han de contemplar la opinión del pueblo a través de la participación ciudadana. Entendemos que el interés general ha de estar encaminado al beneficio colectivo y no particular.

Nosotros seguiremos con las acciones vecinales y jurídicas que sean necesarias para evitar que se nos imponga esta "impertinencia" que atenta contra el interés colectivo. No vamos a consentir que se realice una actuación claramente mercantilista.

Estaremos vigilantes a las posibles soluciones que se busquen para resolver el problema de la entrada de coches fúnebres, toda vez que tanto la plaza como el aparcamiento subterráneo son de uso público y no para que una institución, sea religiosa o laica, obtenga beneficios poniendo como reclamo a la imagen del Santísimo Cristo de La Laguna.

Esperamos que haya quedado clara nuestra postura.

(*) Junta Directiva de La Asociación de Vecinos del Casco Histórico de La Laguna