La Universidad de La Laguna (ULL) cerrará desde hoy viernes a partir de las 21.00 horas hasta el próximo 26 de agosto a las 06.00 horas con el objetivo de dar cumplimiento a su plan de contención del gasto corriente y, así, lograr el máximo ahorro durante estas tres semanas.

A partir de esta noche, la ULL llevará a cabo un cierre integral de todos los centros y dependencias, salvo aquellas que no pueden ver interrumpida su normal actividad (Animalario y algunos laboratorios con ensayos vivos, por ejemplo).

El registro del centro académico quedará inactivo y, de hecho, el Consejo de Gobierno aprobó la declaración de inhabilidad de los días comprendidos entre el 4 y el 25 de agosto de 2013, ambos inclusive.

Con todo, la institución ha considerado oportuno mantener abierta la sede electrónica, que podrá recibir documentos pero cuya tramitación quedará interrumpida hasta la nueva apertura del centro el 26 de agosto. Igualmente, permanecerán activos los servicios telemáticos de plataforma web de la ULL, correo electrónico y campus virtual.

Dada la complejidad de esta medida, se ha establecido un plan técnico de cierres y existe un equipo de coordinación para su correcta implantación y seguimiento, así como para la resolución de dudas y de posibles incidencias. Además, se ha creado una cuenta de correo electrónico de contacto, cierre@ull.es, que está a disposición de toda la comunidad universitaria y de los usuarios de la ULL para plantear dudas y comunicar cualquier eventualidad sobre esta medida.

Asimismo, la institución académica ha publicado un página web con toda la información necesaria sobre este proceso, disponible en el siguiente enlace http://www.ull.es/viewcontent/institucional/ull/2357161/es/paginaespecial CONSECUENCIAS DE LA CRISIS

La ULL ha indicado en una nota que lleva aplicando esta medida desde las pasadas Navidades como consecuencia de la crisis, lo que a su vez ha ido acompañado de otros instrumentos como la renegociación de los contratos de seguridad y limpieza y de un abanico de recomendaciones e instrucciones para disminuir el consumo de electricidad, entre otros asuntos, lo que ha procurado un ahorro de más de 600.000 euros anuales.

Además de las medidas relacionadas con el ahorro energético, la institución académica ha impuesto restricciones en las impresiones, consumo de tinta y otros consumibles, y también se ha limitado la capacidad presupuestaria de los departamentos, centros y vicerrectorados y se ha reducido el complemento de cargo académico de todo el consejo de dirección de la Universidad.

Al mismo tiempo, recuerda que la ULL también está ultimando un plan de fusiones de centros y departamentos que, entre otras expectativas de racionalización de la actividad académica y ordenación de campus, también conllevará una reducción en el gasto ordinario del presupuesto de la institución.