Varios embajadores de Venezuela destacados en África y dos altos funcionarios del Ejecutivo de Caracas llegaron a Nairobi para investigar la muerte, el pasado viernes, de la jefa de la misión venezolana, Olga Fonseca.

El asistente de Administración de la Embajada de Venezuela en Kenia, José Miguel Reyes, aseguró que los embajadores llegaron el sábado.

Según la emisora local Capital FM, "dos altos funcionarios del Gobierno de Venezuela llegaron para presionar en la investigación y el arresto de los culpables".

Además, según la radio keniana, la Policía ya ha interrogado a 9 sospechosos, entre ellos, el conductor de Fonseca, Kevin Odhiambo.

El chófer declaró que había disputas de liderazgo en la misión diplomática venezolana destacada en Nairobi y que algunos empleados de la residencia oficial de la Embajada, donde Fonseca fue hallada muerta, habrían tomado fotos del recinto.

El jefe de la Policía provincial, Anthony Kibuchi, citado por Capital FM, dijo que las investigaciones progresan y que esperan presentar cargos de asesinato contra algunos sospechosos antes de mañana.

"Están escribiendo más testimonios antes de ser llevados a juicio. Estamos haciendo buenos progresos en este asesinato", apuntó Kibuchi.

Por su parte, el Departamento de Investigación Criminal (CID, por su acrónimo inglés) de la Policía de Kenia continúa tomando declaración a los sospechosos.

"Desde luego que llevaremos a algunas personas a juicio. Es cuestión de tiempo", dijo el jefe del CID, Nicholas Kamwende.

Fonseca, de 57 años, fue hallada muerta con claros signos de estrangulamiento el pasado viernes en la residencia oficial de la Embajada de Venezuela en el lujoso barrio de Runda, en el norte de Nairobi.

El suceso ocurrió después de que personal keniano de la residencia oficial venezolana presentara una queja ante la Unidad de la Policía Diplomática en Gigiri, por haber sido supuestamente despedidos por Fonseca, según "Daily Nation".

Esos empleados, siempre según la versión del citado rotativo, fueron supuestamente despedidos por negarse a retirar sus acusaciones de acoso sexual contra el antecesor de Fonseca, Gerardo Carrillo Silva. Sin embargo, el asistente de administración de la Embajada aclaró que los sirvientes "nunca fueron despedidos", sino que "no reconocían la autoridad (de Fonseca)".