Los comercios de Venezuela que venden alimentos y bebidas tienen hasta el 18 de julio para informar de sus precios a la oficina gubernamental de defensa del consumidor, con el fin de combatir la especulación y la inflación, según recordó ayer ese organismo.

La presidenta del Instituto para la Defensa de las Personas en el Acceso a Bienes y Servicios (Indepabis), Consuelo Cerrada, anunció que la medida pretende reducir así los altos índices de inflación, del 27,6%, y se enmarca en el cumplimiento de la Ley de Costos y Precios Justos, en vigor desde el 22 de noviembre.

Desde el 18 de junio, cuando comenzó la inscripción obligatoria de esos establecimientos comerciales en la página web del Indepabis, solo 1.057 usuarios y 267 empresas han cumplido con ello.

Cerrada ha repetido desde que el 15 de mayo pasado se publicó en la Gaceta Oficial la resolución de que los consumidores, organizados en los llamados consejos comunales, deben ser "los principales fiscales" para evitar el incumplimiento de la norma.

Además del precio final a los consumidores, las empresas proveedoras de los comerciantes deben informar al Indepabis del coste de producción y margen de ganancia de cada producto. Son los consumidores quienes deben ejercer "control social", aunque el Indepabis visitará los establecimientos para verificar "si el precio cargado a la página coincide con el colocado en el local".

El 31 de marzo, Chávez dijo que "solo con la intervención" estatal y la fiscalización popular se acabará "poco a poco con la locura de la especulación capitalista".