El ministro de Defensa de Venezuela, Henry Rangel Silva, aseveró ayer que 3.000 soldados rastrean la frontera en busca de "posibles grupos armados" colombianos, en respuesta a la petición de Colombia de perseguir a combatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que sospecha cruzaron al país vecino.

Se trata de "unas operaciones de rastreo y escudriñamiento por muchos sectores en busca de posibles elementos de los grupos armados que hayan penetrado al territorio venezolano", afirmó Silva desde la frontera al canal interestatal Telesur.

"Los grupos irregulares que pudieran pasar, por supuesto, van a conseguir la mano férrea y el trabajo de las unidades militares para enfrentarlos, porque nosotros estamos convencidos de que lo que debe suceder es que haya paz permanente en Colombia", señaló el ministro.

El pasado día 22, el ministro de Defensa colombiano, Juan Carlos Pinzón, aseguró que el "frente 59" de las FARC, que el lunes mató en combates a doce militares en suelo colombiano, tiene su escondite en Venezuela, al otro lado de una frontera que cruzan con facilidad.

Pinzón comentó que esa unidad de las FARC "tiene allí probablemente su área base" desde "hace bastante" tiempo.

"Toda la vida ha sido una frontera muy permeable, pero ahora el resguardo ha mejorado", aseguró Silva al señalar que desde el mismo lunes el Gobierno venezolano desplegó "unos 3.000 efectivos" entre las dos brigadas de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), agentes del comando regional y efectivos de apoyo aéreo.

Estas tropas están "atendiendo a la solicitud que hizo el presidente Santos al presidente Chávez de reforzar la frontera ante una presunción de traslado de estos grupos generadores de violencia armados a nuestro territorio", apuntó.

Silva lamentó la muerte de los soldados colombianos y reiteró el deseo del Gobierno de "que ese conflicto armado que se ha desarrollado durante tantos años cese de una vez por todas".

Estaba previsto que la canciller colombiana, María Ángela Holguín, viajara ayer a Caracas para discutir con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, sobre el combate a los grupos armados en la frontera común con el objetivo de articular mecanismos que "permitan lograr una coordinación efectiva" y revisar el intercambio de información.