El Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela emitió ayer un comunicado en el que rechaza las acusaciones del Departamento de Estado estadounidense, a través del "Informe sobre Terrorismo por países", en el que alega que Caracas no coopera completamente en materia antiterrorista.

El Gobierno venezolano rechazó "de la manera más contundente" estas acusaciones y señaló que el informe "está plagado de afirmaciones falsas, preconceptos políticos y amenazas veladas". Con el texto, la Casa Blanca "ratifica su línea de agresión permanente a los Gobiernos independientes y soberanos como el venezolano, con la intención de imponer, mediante la intimidación, su política internacional de atropello y dominación", arguye el documento.

En esta línea, ratifica su "compromiso absoluto con la paz mundial y el respeto a la autodeterminación de los pueblos". "El Gobierno venezolano continuará desarrollando una política exterior soberana e independiente de construcción de un mundo multipolar, y estableciendo alianzas con los países de su elección, para beneficio común y en un marco de respeto mutuo".

Asimismo, enfatizó que EEUU "no tiene autoridad moral para pretender convertirse en juez planetario en esta materia mientras da refugio y protección a un criminal internacional convicto por actos terroristas como Luis Posada Carriles, por no mencionar al detalle prácticas ilegales como las "operaciones encubiertas" fuera de su territorio o las masacres de civiles en sus numerosos frentes de guerra".