El presidente venezolano, Hugo Chávez, anunció ayer un aumento del 25% del salario mínimo, aplicable en dos tramos, el primero del 10% el 1 de marzo, y un segundo del 15% el 1 de septiembre próximo.

Chávez hizo el anuncio cinco días después de la entrada en vigor de un nuevo esquema cambiario con dos tasas controladas, de 2,6 y 4,3 bolívares por dólar, que significó una devaluación de 20,9% y 100% respecto a la tasa única anterior de 2,15 bolívares.

El salario mínimo mensual vigente en Venezuela es de 967 bolívares (371,9/224,8 dólares).

Generalmente en Venezuela los aumentos anuales del salario mínimo entran en vigor el 1 de mayo, cuando se conmemora el Día del Trabajador.

Chávez resaltó que el incremento del "25 por ciento para este año" llevará el salario mínimo hasta casi "1.200 bolívares (461,5/279 dólares) mensuales" y aseguró que esta iniciativa "busca continuar la disminución de la pobreza" en el país.

Sin embargo, la tradicional Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) calificó ayer de insuficiente la medida y exigió que ese ajuste sea del 60%, según declaró a medios locales su secretario general, Manuel Cova.

El dirigente obrero argumentó que la fuerte devaluación monetaria, en vigor desde el pasado lunes en Venezuela tendrá un "impacto del 60%" en la inflación de este año.

A su vez, subrayó que el incremento de los sueldos "tiene que estar acompañado de un acuerdo" que contemple "que el dinero adicional por la devaluación" que recibirá el Estado "se aplique a planes de desarrollo de fuentes de empleo estable, con seguridad social y salario suficiente".

Cova aseveró que la reciente devaluación fue la "demostración más evidente del fracaso de la política económica" de Chávez.