Un total de 31 supuestos paramilitares colombianos fueron detenidos en una barriada del este de Caracas en el marco de una investigación de inteligencia que ha tenido una duración de varios meses, informaron ayer las autoridades venezolanas.

El vicepresidente venezolano, Ramón Carrizales, informó de que "veintisiete hombres y cuatro mujeres, todos ellos de nacionalidad colombiana", fueron arrestados en el barrio popular de Petare, en una fecha que no precisó.

"No se tiene confirmado que sean paramilitares estas personas detenidas, pero todo parece indicarlo", declaró el vicepresidente venezolano en una rueda de prensa conjunta con el Alto Mando militar, en la sede del Gobierno.

Con el argumento de mantener la seguridad de la investigación, Ramón Carrizales se negó a dar más detalles sobre el operativo y el lugar concreto de reclusión de los detenidos.

Carrizales se limitó a señalar que la detención de los 31 presuntos paramilitares colombianos forma parte de una investigación que "desde hace tiempo" lleva adelante el Gobierno del presidente venezolano, Hugo Chávez.

"Van y vienen"

Entre los frutos de ese trabajo "continuo de inteligencia", el vicepresidente citó sin atribuir recientes decomisos de explosivo plástico C-4, armas y granadas en varias ciudades del país, sin concretar cualquier otro tipo de dato.

"No es una fantasía que han ingresado (a Venezuela) paramilitares (colombianos), que son manejados por muchas de estas personas (de oposición) que salen a hablar de la inseguridad en el país" y que "van y vienen de Colombia", declaró Carrizales.

Recordó que en el vecino país se registra "la desmovilización de gran cantidad de paramilitares", "que son traídos y utilizados (en Venezuela) bajo la fachada de empresas de seguridad, con contratos y todo".

"Es un problema que estamos enfrentando", agregó el vicepresidente de Venezuela, país que comparte con Colombia una activa frontera terrestre de 2.219 kilómetros.

En mayo de 2005, las autoridades venezolanas detuvieron a más de 100 presuntos paramilitares colombianos en las cercanías de Caracas que presuntamente planeaban asesinar a Chávez.