Con lo duro que está el mercado del trabajo y con lo que nos cuestan a los padres nuestros hijos sin empleo, y con lo que han predicado la honradez los socialistas, demagogos y chillones, pasan cosas que claman al cielo.

Por ejemplo, los enchufes de cierta concejal socialista de un pueblo del norte de Tenerife. Estoy dispuesto a dar más detalles. A la hija la enchufó en el Ayuntamiento de Adeje; y al hijo en cierta consejería del Gobierno autónomo desempeñada por un socialista. Y ella, que era follonera y protestona, está ahora calladida, pero calladita.

Siempre es lo mismo. Y la gente lo sabe y está cabreada, pero se ve impotente. Estos tipos (y tipas) que predican la honradez son los peores. A la hora en que hay que colocar al niño y a la niña no tienen reparos, ni les importa lo más mínimo quitarle el puesto a otro que se lo merezca más. Todos son iguales, unos demagogos que utilizan el embudo como les conviene.

Este es otro tipo de corrupción, en la que nadie se fija: el enchufismo más descarado. Y así nos va, señoras y señores, con el país proa al marisco.

Y ya que hablamos del Gobierno, como decían Tip y oll, ¿será verdad lo que dijo Rajoy en el ongreso de la Seguridad Social a 100 euros mensuales o ya estamos diciendo que es más? Porque alguien que conozco le preguntó a su gestor y éste le dijo: "No, sale por unos 150 euros cada empleado, entre pitos y flautas".

Pues que me digan cuáles son los pitos y cuáles son las flautas, y que se lo digan a los que van a emplear nuevos trabajadores, porque si es mentira lo de Rajoy, mal asunto. Los empresarios que vayan a contratar que se enteren bien antes de hacerlo. Y el que avisa no es traidor. Que en este país miente todo el mundo.

Estaría bueno que Rajoy anunciara algo en las ortes y luego la realidad lo desmintiera. Tanto hablar del tema estrella del mundo laboral para fomentar el empleo y ahora nos vengan con la noticia de los pitos y las flautas. Pues a ver cómo se come eso. Si se anuncian 100 euros pues son 100 euros, porque el presidente lo dijo clarito, aunque nosotros ha tiempo que hemos dejado de creer al presidente.

Porque a un presidente que no ha cumplido su programa electoral, que mantiene una Hacienda esquilmadora, que grava la lotería, que dice que va a bajar los impuestos y los sube, que anuncia una Seguridad Social de 100 euros y luego son 150, etcétera, no hay quien lo crea. Nosotros no, desde luego.