ANTES, las Islas eran un desastre en eso de las urgencias. Fue Lorenzo Olarte el que mandó instalar el 1-1-2, y a partir de ahí las emergencias se desenvuelven con mucha eficacia. Todo ello, unido a los avances de la ciencia y de la técnica, hace que tengamos unas urgencias modélicas y una buena planificación de los "recursos", como se dice ahora. Contamos con helicópteros, vehículos todoterreno, personal sanitario competente y formado en masters de urgencias, ambulancias medicalizadas veloces y muy bien equipadas, etcétera. Esto ayuda mucho a que los ciudadanos se sientan tranquilos.

Se ha demostrado en El Hierro, en donde todo ha funcionado bien, se ha evacuado con orden y se ha actuado correctamente en el terreno de las emergencias, coordinando servicios, fuerzas de seguridad, ayuntamientos y Gobierno de Canarias, Ejército y ONG disponibles. Todo muy bien.

A ello hay que añadir los aparatos de precisión del Instituto Geológico Nacional, muy modernos, y cuyo personal ha estado a la altura, con mucha dedicación. Incluso han pedido sus técnicos a los medios informativos que los dejen trabajar porque no paraban los periodistas de llamarlos a sus teléfonos móviles, distrayéndolos en su misión de seguimiento del fenómeno natural.

Es interesante destacar esto, cuando precisamente lo que hacemos los periodistas es denunciar lo que sale mal, y muchas veces nos olvidamos de aplaudir lo que resulta eficaz para el ciudadano, como es el caso. A esto es preciso añadir el buen comportamiento de la población herreña, que ha sido ejemplar. Ahora se les pedirá paciencia a la hora de volver a ocupar sus casas y sus negocios en La Restinga, pues todavía el desenlace de la erupción es incierto y, por tanto, es preciso tomar otras precauciones.

Pero lo de El Hierro ha servido para confirmar que tenemos un personal muy competente dedicado a las emergencias y que, sobre todo, existe coordinación y un buen servicio de prensa.

Ahora que el Cabildo de Tenerife, por razones presupuestarias, está liquidando a una parte del personal de la BRIFOR (Brigada Forestal) que se lo piensen sus dirigentes. Es cierto que hay que apretarse el cinturón, pero es que no ha habido incendios este año, año de olas de calor, precisamente por el empeño que pone esta gente en prevenirlos y evitarlos. No empiecen a liquidar esta brigada sin ton ni son porque es muy necesaria.

En resumen, que en El Hierro todo ha funcionado bien, que tenemos unos hombres y mujeres con mucha dedicación a los demás y que todos están desempeñando su papel con eficacia; y que se nos llena la boca contándolo porque son canarios que ayudan a otros canarios. Como debe ser.