Una dura estancia en los servicios de Urgencias

A raíz de la información publicada ayer por este periódico sobre la carencia de medios en las Urgencias de los hospitales públicos tinerfeños, derivados sin duda de los recortes presupuestarios, un lector asegura haber sufrido esa experiencia hace escasos días, una experiencia que cualquiera espera que suceda en un país del tercer mundo, pero no en España. El paciente fue ingresado a través de Urgencias del hospital de La Candelaria, donde le dejaron en una camilla de la zona de los pasillos, donde la temperatura no era especialmente agradable. Ninguna de las personas que le rodeaban tenía almohada. Mantas, algunas.

La almohada hay que llevarla desde casa

La historia no termina ahí. Ante la incomodidad propia de estar tumbado en una camilla, uno de los familiares pidió al personal de Urgencias una almohada y una manta para cubrirse. La temperatura de la estancia era, al parecer, realmente baja. La respuesta que le dieron no pudo ser más elocuente: "Yo les recomiendo que la almohada la traigan desde casa porque no hay". Tampoco había mantas, pero el familiar en cuestión se hizo con sábanas que encontró en algún lugar. La atención de los trabajadores, eso sí, fue magnífica. Sanidad, sin embargo, niega la escasez de este material.

Alumnos "con" PAU, fuera del curso para mayores

Las instrucciones que ha dado el Ministerio de Educación a las universidades -entre ellas a la ULL- establecen que, a partir del próximo año, los alumnos que hayan superado la PAU no podrán inscribirse en el curso de acceso para mayores de 25. No hagan caso, por lo tanto, al titular de la noticia que abría la página 22 de nuestra edición de ayer, en la que se decía exactamente lo contrario, y sí al texto, donde la información aparecía correctamente. Lamentamos la inquietud que el error pueda haber generado entre los interesados en esta modalidad de acceso a la enseñanza superior.

La beca será para los que aprueben el 60%

Otra equivocación en la misma página: la ULL no becará a los alumnos que aprueben un 30% de los créditos de que se hayan matriculado, sino a los que superen el 60%. De esta forma, la institución académica pretende cubrir el vacío que, a su juicio, ha dejado el Gobierno de Canarias al elevar al 70% el requisito académico de créditos aprobados que, junto al cumplimiento del baremo de renta, deben satisfacer los estudiantes universitarios para ser beneficiarios de una ayuda. Nuevamente pedimos disculpas, en este caso a quienes hayan podido hacerse ilusiones.