Una transeúnte cayó ayer en una arqueta de telefonía que permanecía abierta en la céntrica calle de La Rosa. Según cuentan los testigos el incidente no pasó a mayores gracias a la escasa profundidad de la arqueta, que sólo estaba vallada por uno de sus lados, y a la agilidad de la persona que tuvo el incidente, quien además padece problemas de vista. No pasó a mayores, pero se debe tener más cuidado con estas cosas.

Maniobras del Ejército en Las Maretas

Un vecino de Los Abrigos se quejaba ayer ante este periódico de las maniobras que, de manera regular, efectúa el Ejército en la zona de Las Maretas, en el Sur de Tenerife. Asegura este lector que los militares instalan campamentos y despliegan el material que necesitan para sus ejercicios en esta zona pegados a la carretera. A su juicio, esta situación afecta al entorno y también a la imagen de la Isla ante el turismo.

Coches aparcados que impiden la visibilidad

No son pocos los cruces en Santa Cruz de Tenerife que por el nulo respeto de los conductores, que estacionan en la misma intersección, e incluso sobre los pasos de peatones, registran un elevado índice de acci- dentes. El lector, que pide sensibilidad con este tema, argumenta que en su zona, en el barrio del Perú, hay varios cruces con esta problemática, por lo que ruega sanciones para evitar males mayores.

Le piden una autorización que no era necesaria

Una naviera que cubre un trayecto interinsular permitió a un menor de 15 años coger la guagua que lo trasladó al muelle de Los Cristianos, pero al ir a embarcar le dijeron que como no tenía autorización paterna no podía subir al buque y que se buscara la vida para volver a Santa Cruz. Al final un contacto le facilitó el embarque. Sin embargo, en la web pone que sólo los menores de 14 necesitan tal autorización.