Representantes de la Federación de Empresas de la Construcción de Canarias se han reunido con miembros del Cabildo de Tenerife para establecer un calendario de trabajo con el que debatir una solución a la falta de zonas de extracción de áridos en la isla.

Según indica en un comunicado la Confederación Canaria de Asociaciones Profesionales, donde está integrada la federación, las consejerías implicadas en el Cabildo tinerfeño son "plenamente conscientes" de la urgencia dar solución al grave problema que tiene planteado la isla pues, actualmente, no hay áridos con los que llevar a cabo las obras planificadas.

Explica que en Tenerife hay una docena de instalaciones legales y preparadas para producir áridos con todas las garantías industriales y ambientales, que deben proceder de los desmontes de las obras que se realicen o de áreas extractivas que no están delimitadas ni autorizadas.

Añade que con el reciclaje y los desmontes "es absolutamente imposible" cubrir las necesidades de áridos por lo que resulta "fundamental y prioritario" agilizar los cauces legales y reducir la carga burocrática.

Los áridos son una materia prima de origen mineral básica para el desarrollo de la construcción, edificación y obras públicas, que se consume de acuerdo con la demanda de los mercados y por ello, los principales consumidores son las administraciones públicas, según la federación.

La media de consumo óptimo internacionalmente aceptada son 11 kilos por habitante y día, que es lo que se consume en la Unión Europea.

Alemania consume 28 kilos por habitante y día, Cataluña y Madrid 11 kilos, País Vasco casi 10 y Tenerife no llega a 3 kilos por habitante y día, lo cual da idea del desplome económico que ha traído la crisis, agrega.

En 2007 las empresas de la CONCAP, que agrupa al 99 por ciento del sector, producían 30.000 toneladas de áridos al día contando únicamente los productos procedentes del reciclaje y los desmontes y sin contabilizar la extracción propiamente dicha.

Los áridos no se consumen únicamente en la construcción, aunque la fabricación de materiales es su principal destino, pues forman parte de productos cosméticos, medicina, fibra de vidrio, electrónica, porcelanas, pintura y depuración de aguas.