El alcalde de La Laguna, José Alberto Díaz, apostó ayer por seguir gobernando el municipio con el Partido Socialista, ya que considera que es el mejor pacto posible para llevar a Aguere por la senda del progreso y que de ello se beneficien los ciudadanos. Reconoció por primera vez, además, la existencia de "tensión" con el propio Javier Abreu, al que se cuidó muy mucho de no nombrar en ningún momento.

En el ámbito de la rueda de prensa celebrada con el fin de dar a conocer los acuerdos de la Junta de Gobierno, el dirigente mostró firmeza al señalar que el gobierno en La Laguna debe girar en torno a "un alcalde con un equipo conformado por dos partidos", una situación que bajo su punto de vista no se ha desarrollado y por eso "tomé una decisión. Y sigo diciendo: Un alcalde con un equipo y al que no le guste bien, y si gusta...".

Por otra parte, confirmó la existencia de un clima de tensión importante en el gobierno y destacó, en cambio, que no ha significado una paralización de la actividad en la gestión pública de la administración. Sobre este asunto aclaró que en ningún caso se puede hablar de ruptura con el Partido Socialista.

En cuanto a los acuerdos de la Junta de Gobierno, Díaz destacó, entre otros, la rúbrica a una colaboración con el Gobierno de Canarias para el desarrollo de la iniciativa La Laguna, Ciudad del Patrimonio, y otro para recibir los pagos de parte del dinero de los ARUS de El Centurión y La Verdellada, el primero de 278.000 euros y el segundo de 21.000 euros.