El Colegio Oficial de Psicología de Santa Cruz de Tenerife reclama un "cambio de actitud" de cara a la celebración este jueves del ''Día Internacional de las Personas con Discapacidad'' ya que "las personas con discapacidad contribuyen al bienestar, progreso y diversidad de la sociedad".

''La inclusión importa: acceso y empoderamiento para personas con todo tipo de capacidad'' es el lema elegido este año por Naciones Unidas con el fin de promover que el alto porcentaje de personas con discapacidad sean visibilizadas e incluidas en aspectos sociales importantes para que puedan disfrutar del acceso a la sociedad de igual forma que otros, en áreas como la movilidad, el empleo, la educación, formación y la vida política y social.

Por ello, el Colegio Oficial de Psicología, a través de la Vocalía de Discapacidad, Envejecimiento y Dependencia, quiere proclamar que las personas con discapacidad son agentes y beneficiarios del desarrollo, y realizan una contribución importante al bienestar, el progreso y la diversidad de la sociedad en general.

Desde el ámbito de la práctica profesional de la Psicología, la atención a las personas con discapacidad evita poner el foco en las limitaciones concretas que presentan y pone el acento en las habilidades con las que cuentan.

En la vida cotidiana, señala el Colegio, la persona con discapacidad se enfrenta a diversos obstáculos, que están directamente relacionados con el tipo de apoyos y las capacidades que pueda activar para poder llevar una vida plena, barreras que se encuentran muy vinculadas con el entorno familiar y social en el que se encuentre inmerso.

En ambos casos, el grado de aceptación de las posibles limitaciones que esa dificultad conlleve, así como el trabajo que desde la familia y el entorno se haga para favorecer el desarrollo de esa persona en su complejidad y para la mejora del resto de capacidades, es esencial para la plena integración de la persona con discapacidad.

DESCONOCIMIENTO Y ACTITUD DEL ENTORNO

Según el Colegio, estas personas se enfrentan con barreras no sólo físicas sino, sobre todo, sociales, como el rechazo y discriminación en el ámbito social, laboral, formativo, lúdico y afectivo, muchas veces por el desconocimiento general sobre la discapacidad y sobre cómo tratar a una persona con algún tipo de discapacidad, y es esta actitud del entorno la que evita la participación plena y efectiva en la sociedad de estas personas en igualdad de condiciones.

Por este motivo, señala que es muy importante profundizar en el "cambio de actitudes" por parte de la población en el reconocimiento de las diferencias individuales y en el respeto hacia los demás, centrándose en las capacidades y potencialidades que cada sujeto puede desarrollar y aportar a la sociedad.

"Hay que incidir en la educación y trabajar en la igualdad para evitar cualquier tipo de discriminación hacia el que es diferente. Y en este ámbito debemos resaltar el trabajo que están llevando a cabo las asociaciones de personas con discapacidad en su lucha para la integración global de este colectivo y que, con su constante esfuerzo, sensibilizan a la sociedad sobre las distintas necesidades de cada grupo concreto", comenta.