El presidente del XXVIII Symposium de la Sociedad Española de Historia de la Psicología, Justo Hernández, ha lamentado el estado abandono en el que está el inmueble que hace un siglo albergó, en el municipio tinerfeño de Puerto de la Cruz, el primer centro primatológico del mundo.

En una entrevista a Efe, Justo Hernández dijo que produce tristeza ver el abandono de ese inmueble, conocido como la Casa Amarilla, que ha sido catalogado como Bien de Interés Cultural, pero que desde hace más de dos decenios está abandonado y casi en ruinas en una parcela de 53.000 metros cuadrados.

La Academia Prusiana de las Ciencias de Berlín fundó en 1913 en la Casa Amarilla el que sería el primer centro del mundo en el que se han hecho experimentos con monos en un lugar adecuado para ellos, señaló el presidente del XXVIII Symposium de la Sociedad Española de Historia de la Psicología, que se celebrará del 7 al 9 de mayo en Puerto de la Cruz.

El simposio tendrá lugar en Puerto de la Cruz para conmemorar el centenario de la Casa Amarilla, en la que la Academia Prusiana de las Ciencias de Berlín propuso estudiar a los animales evolutivamente más próximos al hombre tanto desde el punto de vista de sus habilidades físicas como del de su percepción cognitiva.

Justo Hernández no estima adecuado hablar en sentido propio de inteligencia de los monos sino tan sólo en un sentido análogo.

Profesor de Historia de la Medicina, Justo Hernández aseguró que desconcierta el poco interés que hay tanto en Canarias como en toda España por este centro, y comentó que hasta la Filmoteca de Canarias debería de valorar en mucha mayor medida que en ese centro se grabó la primera película científica del archipiélago.

La situación de la Casa Amarilla es compleja y no resulta fácil de resolver pero tampoco las autoridades parece que hayan mostrado una sincera voluntad política de llegar a una solución adecuada, señaló Justo Hernández, quien recordó que hasta finales de los años noventa del siglo pasado estaba en buenas condiciones.

Explicó que al parecer los propietarios del inmueble intentaron derribarlo y quedaron en pie las cuatro paredes. Además, a finales de los años noventa un temporal dañó gravemente la estructura del edificio, que ahora está en ruinas.

Justo Hernández comentó que hubo un proyecto de los propietarios del zoológico Loro Parque para hacerse cargo de la Casa Amarilla, pero, insistió, nunca recibieron una respuesta satisfactoria a su propuesta.

Recalcó que la Casa Amarilla es un hito en el patrimonio científico canario y español por ser un centro en el que se realizaron estudios que fueron pioneros y seguidos por científicos estadounidenses y de todo el mundo, y criticó que no haya conciencia de su importancia.

El centro fue conocido internacionalmente por los trabajos que su segundo director, el psicólogo Wolfgang Köhler (1887-1967), realizó sobre la capacidad cognitiva de los chimpancés para resolver problemas.

Wolfang Köhler fue uno de los fundadores de la psicología de la Gestalt y sus trabajos en Tenerife mostraron que hay una continuidad entre los procesos mentales de los monos y los de los humanos.

Justo Hernández declaró que los chimpancés fueron trasladados desde Camerún, por entonces colonia alemana, hasta Tenerife, para estudiar su comportamiento en un lugar con buen clima.

Recordó que con los trabajos de Köhler se observó que los chimpancés eran capaces de apilar cajas para conseguir un plátano que era inaccesible, entre otros hitos, de forma que, según Justo Hernández, la conclusión más importante fue el concepto de Einsicht (en inglés Insight) que era el instante especial en el que el mono actúa como si viera la solución, sin aprendizaje previo.

Respecto al futuro de la Casa Amarilla opinó que existía el proyecto de rehabilitación realizado por Pedro Domínguez Anadón, dentro del plan de modernización de Puerto de la Cruz, pero la Casa Amarilla ha sido excluida, pero Justo Hernández afirmó que no cejará en su empeño por preservar el inmueble.