Para Aurelio Abreu, vicepresidente y consejero de Bienestar Social, Sanidad y Dependencia del Cabildo de Tenerife, la calidad en la atención a la ciudadanía "debe ser una preocupación constante de quienes tenemos responsabilidades en la gestión de lo público," de ahí que se desarrollen programas e iniciativas con el fin de mejorar la percepción que los ciudadanos tienen de los servicios. En el Instituto Insular de Atención Social y Sociosanitaria (IASS) esta preocupación "se incrementa por su propia esencia, ya que sus competencias están orientadas a un sector de la población especialmente sensible y vulnerable". El consejero del IASS, Miguel Ángel Pérez, destaca que "nos hemos planteado incorporar a la gestión sistemas de calidad". En este sentido, "la ciudadanía tiene a su disposición diferentes canales para trasladar su opinión al IASS". Así, además de los Libros de Quejas y Reclamaciones, los ciudadanos pueden hacer sus aportaciones de forma presencial, por correo o vía telemática. Cuando se presenta una queja en un centro gestionado por el IASS se pone en funcionamiento un procedimiento que culmina siempre con la respuesta al ciudadano informándole de las actuaciones realizadas y, en su caso, de las medidas adoptadas. Fruto de este esfuerzo, en los últimos dos años se ha producido una disminución progresiva de las quejas y reclamaciones presentadas. Así, frente al medio centenar que se formalizaron en 2012, en 2013 se registraron 21 y durante el primer semestre de 2014 se han recogido una docena.