Son tres y los tres reaccionaron de forma distinta. Solo el PSOE miró de frente, mientras CC y PP dejaron claro que la cosa no va con ellos. Las palabras de la Federación Provincial de Entidades de la Construcción de Santa Cruz de Tenerife (Fepeco), atribuyendo a la "dejadez de algunos políticos de Tenerife" la paralización y/o demora de las grandes infraestructuras que se realizan en la Isla, obligó a Coalición Canaria (partido mayoritario en el Cabildo y que ostenta la Presidencia) a esconderse es un casi escueto "no vamos a decir nada".

Más o menos lo mismo que hizo el presidente de la corporación, Ricardo Melchior, quien durante su intervención en el programa "El debate", de La 1 de Televisión Española en Canarias, anoche optó por echar balones fuera en este asunto.

La Isla carece de políticos "valientes que defiendan lo que en justicia le corresponde. En cambio, se vuelcan de manera injustificada con los intereses de otras islas y siempre en perjuicio de Tenerife", aseguraba el presidente de Fepeco anteayer, entre otras muchas cosas. "Las obras se planifican, se licitan, se ejecutan, se pagan y se terminan con total celeridad y normalidad en las demás islas, mientras que, en Tenerife, todo son pegas, trabas, manifestaciones para paralizar cualquier iniciativa inversora y creadora de puestos de trabajo", reflexionó Antonio Plasencia.

Palabras "fuertes y contundentes", pero con las que José Luis Delgado, portavoz del PSC en el Cabildo, dijo estar de acuerdo porque "Tenerife está infradesarrollada". Coincidencia que se produce en el tiempo, también, con la demanda que el consejero responsable en Carreteras de la Isla lleva planteando en el seno del gobierno insular y frente al Ejecutivo canario: "Que la inversión comprometida, se haga". En otras palabras, que el dinero que llega para estas obras, se invierta en tales obras.

En cualquier caso, Delgado es partidario "más de buscar soluciones que de señalar a culpables". De ahí que ya estén convocadas reuniones con patronales y con su partido en la Isla para avanzar en esa línea. "Tenerife no obtiene, en reciprocidad, lo que entrega. Tenemos el mismo derecho, y cumplimos con nuestro deber, que otros lugares de España", apostilló José Luis Delgado.

Cuestión de prioridades

En el PP del Cabildo, su presidente-portavoz, Antonio Alarcó, fue políticamente correcto y habló de que "en estos momentos de crisis hay que priorizar". Claro que la priorización le corresponde, según él, al Gobierno de Canarias, administración "que tiene que pagar a los Cabildos lo que les debe". Con las dos instituciones sobre el tapete, Alarcó aprovechó para recordar que ambas están gobernadas por el pacto CC-PSOE y que, curiosamente, "andan metidas en denuncias de uno contra otro". En su línea de "palo y zanahoria", insistió en que "nosotros ponemos por delante que queremos grandes consensos en los grandes temas", pero "no hay que mezclarnos a todos", como parece hizo Fepeco, según entendió.