Los empleados del centro de trabajo de Traysesa, empresa adjudicataria del mantenimiento de la autopista del Sur, iniciaron ayer tres días de huelga que concluirán mañana, si bien están evaluando darle carácter de indefinido al paro con el que reclaman el cobro de los cinco meses de salario consecutivos que les adeudan, además de las pagas extras de junio y julio del año pasado.

Ayer se manifestaron ante el Cabildo y mantuvieron una reunión con el consejero de Carreteras, José Luis Delgado, quien les transmitió que la renovación mensual del contrato con Traysesa tiene por objetivo garantizar el sueldo a la plantilla y, al tiempo, propiciar que los empleados puedan ser subrogados en la próxima adjudicación del servicio. Eso se producirá después del concurso que la Corporación insular convocará al efecto a mediados del año.

Desde el pasado 18 de enero, la empresa Traysesa está afectada por un proceso concursal en el Juzgado de lo Mercantil de Santa Cruz de Tenerife.

El presidente del Comité de Empresa, Antonio Chávez, explicó ayer que "hay compañeros que están a la espera de una decisión del juez para poder cobrar algo", para lo que la autoridad judicial tendrá que librar los pagos a Traysesa que el Cabildo tiene bloqueados por las cantidades adeudadas por la empresa a Hacienda y a la Seguridad Social.

"La gente no puede más", fue la expresión con la que Chávez resumió la situación, asegurando que hay parte de la plantilla "que está al límite y que no tiene dinero ni para trasladarse a su puesto de trabajo".