"No puede ser un año más. La Patrona de Canarias, la Virgen de Candelaria, nos convoca a renovar nuestra esperanza. Nos convoca a peregrinar en busca de una luz en medio de las dificultades. No puede ser un año más, porque en ello nos va la vida", escribía hace unos días el rector de la Basílica, fray Alexis González de León. Resumía en esas palabras la presencia de la crisis económica en los actos de esta fiesta popular en la que el representante mayor de los padres dominicos convirtió en lema la expresión "mejor un kilo de lentejas que un ramo de flores".

La romería y ofrenda folclórica, floral y frutal se convirtió en esta ocasión en un exponente de esa "filosofía" con la que la organización de los actos tradicionales pretendió crear un cauce de ayuda a la población más necesitada. El colorido de las flores y el tipismo propio de la música y el vestuario tradicional de las Islas se acompañó prioritariamente de los 5.000 kilos de productos que serán repartidos por Cáritas Interparroquial.

"Que nuestro peregrinar sea fundamentalmente responsable y ecológico. ¡Demasiados incendios en un año!", palabras del rector que ratificaban la "presencia" del fuego en esta fiesta en la que los peregrinos sufrieron sus efectos al no poder transitar por los senderos tradicionales que cruzan el monte de la Isla. Eso no impidió que miles de ellos llegaran durante todo el día, especialmente a última hora de la tarde y, previsiblemente, en la madrugada.

El manto rojo coral.- La imagen de la Morenita viste hoy con un manto de rojo coral con decoraciones de hilo dorado, donado hace más de 30 años por la familia de Juan Mesa y Remedios Díaz, de Buenavista del Norte. A juego, entre sus manos lleva unos rosarios, también de coral del mismo color del manto.

La Patrona General de Canarias seguirá recibiendo hoy a miles de peregrinos y a los más de 870 participantes que se esperan en la 21 edición de la marcha atlética, a los que la organización pide que colaboren con la entrega de alimentos no perecederos.

El protocolo.- Eso ocurrirá en torno a las 9:15 horas, una antes de que la fiesta comience a ser más oficialista con la procesión cívica consistente en el traslado del escudo del municipio desde la Casa Consistorial hasta la Plaza de la Basílica, a través de la calle de La Arena o de Obispo Pérez Cáceres, por parte de la Corporación local.

Este año, según el protocolo establecido, la Casa Real estará representada por el teniente general y Jefe del Mando de Canarias, César Muro Benayas.

El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, se incorporará a la fiesta poco antes de que comience la eucaristía central, que presidirá el obispo, Bernardo Álvarez. En el primer templo mariano estarán, junto a las autoridades, los fieles y peregrinos que también acompañarán a la Virgen de Candelaria en su recorrido semestral (lo hace también con motivo de su fiesta litúrgica, que tiene lugar el 2 de febrero) alrededor de la plaza de la Patrona. Ese es uno de los momentos más esperados por los devotos.

Recaudación.- En momentos como el actual es cuando la solidaridad cobra valor en fiestas como ésta. El año pasado los peregrinos, fieles y devotos que acudieron a la Basílica de Candelaria depositarios donativos por un importe cifrado en unos 6.000 euros. Esa ayuda "dio de comer a muchos que lo necesitaban".

La Octava.- Cuando la imagen de la Patrona General de Canarias retorne al primer templo mariano este mediodía habrá que esperar hasta la Octava, el domingo, que será cuando con las eucaristías de las 8:00, 10:00, 12:00 y 18:00 horas concluya el programa oficial de la festividad popular que tiene lugar cada mes de agosto.