La Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Tenerife (PAHT) se desplazó hace diez días a una sucursal bancaria de Santa Cruz para presentar diversas solicitudes de alquiler social y dación de pago. Al llegar, la sucursal les cerró las puertas a cal y canto porque el director sentía peligrar su integridad física a pesar de haber acudido allí de forma pacífica.

Ante esto, la plataforma se manifestó ante la puerta de dicha sucursal para protestar por el trato que les había dado días atrás. Al lugar acudió también Asunción Frías, concejala de Sí se Puede en Santa Cruz, que solicitó que se aplique el Protocolo Antidesahucios, "que establece que el consistorio debe mediar entre los titulares y los bancos", recalcó.

Durante la reunión, se repitió la situación: la sucursal cerró las puertas, que no se abrían ni para dejar pasar a sus clientes, que nada tenían que ver con la manifestación.

El Cuerpo Nacional de Policía informó a los manifestantes de que el banco no quería sentarse con el ayuntamiento para debatir sobre el Protocolo Antidesahucio. "Como no se quieren sentar, no podemos estar aquí pidiendo que se apliquen estas medidas", indicó Nancy García Velasco, miembro de la Plataforma.