La Empresa Mixta de Aguas de Santa Cruz de Tenerife (Emmasa) anunció ayer que ha puesto en marcha los sistemas de desodorización situados en la estación de bombeo de Cabo Llanos y en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Santa Cruz con el fin de minimizar o eliminar los malos olores.

Los dispositivos se pusieron en marcha durante el pasado fin de semana y, tras algunos reajustes previstos, funcionarán a pleno rendimiento durante 24 horas al día. Su cometido pasa por eliminar los compuestos que provocan los malos olores. A menudo, y según explica la compañía, se trata de mezclas de sustancias liberadas en procesos de descomposición anaeróbica o de diversos compuestos orgánicos volátiles.

Según la naturaleza y concentración de los contaminantes, además de las condiciones generales del flujo a tratar (temperatura, oxígeno, humedad relativa...), se han desarrollado diversos procesos para retener o descomponer los elementos con el fin de reducir las quejas por malos olores, que son de las más habituales.