El Cabildo de Tenerife insta al Gobierno de Canarias a que en el presente ejercicio proceda a abonar a las entidades locales las cantidades previstas en el convenio de colaboración suscrito con la Federación Canaria de Municipios (Fecam), el 30 de julio de 2010, en materia de escuelas infantiles.

Asimismo, pide al Ejecutivo regional que en el ejercicio de 2012 incorpore al Presupuesto General de la Comunidad Autónoma la partida equivalente, como mínimo, a la prevista y ejecutada el año pasado para sufragar parcialmente los gastos de mantenimiento de las escuelas infantiles públicas y la atención al menor fuera del hogar por persona cuidadora.

Esta decisión de la Corporación insular fue adoptada por unanimidad a través de una moción institucional se basa en que la eliminación de las ayudas para las escuelas infantiles no prorrogando el convenio ya en este ejercicio "supone un gravísimo contratiempo para las familias y las corporaciones locales que han de costear este servicio social". En cualquier caso, y "a pesar de ello", el Cabildo reconoce que los ayuntamiento "han asumido con enorme sacrificio esta inesperada situación, pero advierten que es totalmente insostenible".

Es indiscutible

Todos los grupos políticos con representación en la Administración insular defienden como "indiscutible" la existencia de las escuelas infantiles y/o guarderías porque "afianzan un alto valor de contenido social que está procurando altos beneficios al menor y a su entorno familiar con una impronta profunda que es imparable y que, por tanto, exige a las administraciones públicas la difusión y mantenimiento de estos espacios dedicados al cuidado de los más pequeños".

Otro aspecto en el que hace hincapié tanto el gobierno insular como la oposición es en el hecho de que "la Educación Infantil responde, también, a la necesidad de conciliar la vida familiar con la inserción de padres y madres en el mundo laboral".