El movimiento 15-M en Santa Cruz de Tenerife ha celebrado este viernes una manifestación que ha partido desde la Plaza de la Candelaria y se ha detenido varios minutos en la sede del Parlamento de Canarias en muestra de solidaridad con los acampados en la Plaza de Catalunya, que fueron desalojados esta mañana.

Tras leer un manifiesto en el que volvieron a mostrar su "indignación" ante lo sucedido en Barcelona y Lleida condenaron "la brutalidad" ante una acción de protesta pacífica, partieron hacia la sede de la Cámara Legislativa tras una pancarta que rezaba el lema ''Si tocas a uno, nos toca a todos'' y armados con cacerolas y flores.

A continuación partieron hacia la Plaza Weyler donde tenían lugar los actos con motivo del Día de las Fuerzas Armadas. Una banda tocaba, mientras el colectivo, unas 150 personas --en ese instante-- según la Policía Nacional, gritaba: ''Lo llaman democracia y no lo es''. La Policía acordonó la zona para que los ''indignados'' no avanzaran, ya que en el lugar a las 20.00 horas estaba previsto el arriado de la Bandera, presidido por el general jefe del Mando de Canarias y con la presencia de autoridades civiles y militares.

Los indignados entonces retornaron sobre sus pasos y regresaron a la calle Teobaldo Power, sede del Parlamento. Volvieron a detenerse y entre otros cánticos corearon ''No nos representan'', ''Ahí está la cueva de Alí Babá'' o ''Barcelona solidaridad''. Con las manos alzadas y tintadas de blanco y rojo continuaron su marcha para regresar pasando por la Plaza del Chicharro a la Plaza de la Candelaria. Una vez allí volvieron a sonar las cacerolas con más fuerza que nunca.