El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife adjudicó el servicio de regularización fiscal en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) a la UTE Ingesis S.L. y Hermanos Alonso Garrán, contratación que fue ratificada el pasado lunes en el transcurso de la sesión de la Junta de Gobierno Local de la ciudad.

La Corporación municipal acomete así la actualización de los datos que registra el Catastro por primera vez. El concejal de Economía y Hacienda, Jaime Hernández-Abad, ha manifestado que, de esta forma, "continuamos con la labor de hacer partícipes a todos los ciudadanos de sus obligaciones tributarias, aplicando para ello el principio de igualdad que debe regir a todos los vecinos de Santa Cruz, porque todos tenemos la obligación de abonar nuestros impuestos para el sostenimiento de los servicios municipales".

El objeto principal del contrato adjudicado es complementar los trabajos que ya está realizando la Gerencia Provincial del Catastro en lo que se refiere a la actualización y revisión del padrón catastral del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) en el municipio.

El edil comentó que esta empresa "realizará un trabajo intenso de campo para detectar todos aquellos inmuebles que no estén dados de alta en el Catastro". Tras la depuración de dicho padrón, el siguiente paso será formalizar la inscripción de los mismos para poder liquidar a continuación el correspondiente Impuesto de Bienes Inmuebles.

Más recaudación

La realización de este trabajo permitirá a la Administración local, en primer lugar, la depuración del padrón fiscal con su consiguiente adaptación a la realidad física y, de igual forma, se conseguirá un incremento en el importe bruto de dicho padrón. La repercusión de esta medida también conllevará el aumento de la recaudación en la aplicación de la tasa de recogida de residuos sólidos urbanos, dado que ambos están asociados.

Desde el gobierno municipal de Santa Cruz de Tenerife, el concejal Jaime Hernández-Abad ha considerado el objeto del presente contrato como una "inversión fundamental, ya que permitirá al consistorio desarrollar un incremento sustancial en los padrones que se someterán al cobro a lo largo del próximo ejercicio" y, por tanto, aumentar la recaudación.